/ lunes 28 de junio de 2021

Los derechos de la población LGBTI

Los homosexuales y las lesbianas han sufrido rechazo en todas las sociedades; a cuenta gotas se despenaliza su persecución, y en los países con gobiernos fascistas, comunistas y fundamentalistas o con gran influencia religiosa, les criminalizan con mayor rigor: la referencia legal la definen como sodomía. En la categoría de homosexualidad se incluye a las mujeres lesbianas; es curioso cómo también en estos grupos que debiesen pugnar por mayor progresividad, sigue imperando el enfoque masculino.


Cabe destacar algunos datos emblemáticos a favor de los derechos de las personas con diversa orientación sexual e identidad de género: Noruega en 1981 fue el primer país en legislar una ley contra la discriminación de homosexuales; Sudáfrica en 1997 fue el primer país en incluir en su Constitución la prohibición de la discriminación en función de la orientación sexual.


Sin embargo la gran fecha emblemática de la lucha por sus derechos y libertades queda inscrita el 17 de mayo 1990 en que la Organización Mundial de la Salud de Naciones Unidas elimina de la lista de enfermedades mentales la homosexualidad y la considera como una variación de la sexualidad humana; además como consecuencia se rechazan la “terapias” que pretenden “curar” para quitarles “esa inclinación enfermiza” y volverles al redil heterosexual. En 1994 Naciones Unidas emite una resolución para que los estados parte reconozcan que la discriminación de personas por diversa orientación sexual e identidad de género violenta el Pacto Internacional Sobre Derechos Civiles y Políticos. Aún así, todavía hay países que les castigan con pena de muerte o con privación de la libertad; a pesar de estas recomendaciones de los organismos multilaterales persisten actitudes de odio.


En México hay avances legales importantes; en 2001 se incluye en la Constitución el principio de no discriminación por “preferencia”, como un escueto avance el reconocimiento de los derechos de las personas de la comunidad LGBTTTI. No es sino hasta 2011 que se señala explícitamente la no discriminación por preferencias sexuales. Hoy hay acciones afirmativas para que compitan en las elecciones. Falta trabajar más para erradicar el estigma social y la discriminación que sufren en los ámbitos laborales y en los servicios de salud. La homofobia sigue cobrando muchas vidas de gays y trans.


Los partidos poco a poco avanzan en su inclusión en sus espacios de dirección y hoy estuvieron en las candidaturas a partir de una directriz del INE. Aplausos a las instituciones para prevenir la discriminación por sus acciones a favor de los derechos de homosexuales, lesbianas, bisexuales, transexuales, transgénero, trasvestis e intersexuales, e incluso queer.


¿Cuántas personas forman parte de esta comunidad? Me parece que no se podría tener un dato con certeza porque incluso muchos y muchas no lo dirían precisamente porque en la sociedad hay mucho prejuicio, los censos muestran que muchas familias no aceptan que alguno o alguna de sus integrantes se reconozcan no heterosexuales. Estar en el clóset en un opción que se asume sin bronca; pero también por conveniencia o por temor.


En México se realizó la marcha del Orgullo Gay; han regresado a las calles con el multicolor de la bandera del arcoíris nuevamente después de un año de pandemia. En la exigencia del ejercicio pleno de sus derechos, ahí estaremos siempre

Los homosexuales y las lesbianas han sufrido rechazo en todas las sociedades; a cuenta gotas se despenaliza su persecución, y en los países con gobiernos fascistas, comunistas y fundamentalistas o con gran influencia religiosa, les criminalizan con mayor rigor: la referencia legal la definen como sodomía. En la categoría de homosexualidad se incluye a las mujeres lesbianas; es curioso cómo también en estos grupos que debiesen pugnar por mayor progresividad, sigue imperando el enfoque masculino.


Cabe destacar algunos datos emblemáticos a favor de los derechos de las personas con diversa orientación sexual e identidad de género: Noruega en 1981 fue el primer país en legislar una ley contra la discriminación de homosexuales; Sudáfrica en 1997 fue el primer país en incluir en su Constitución la prohibición de la discriminación en función de la orientación sexual.


Sin embargo la gran fecha emblemática de la lucha por sus derechos y libertades queda inscrita el 17 de mayo 1990 en que la Organización Mundial de la Salud de Naciones Unidas elimina de la lista de enfermedades mentales la homosexualidad y la considera como una variación de la sexualidad humana; además como consecuencia se rechazan la “terapias” que pretenden “curar” para quitarles “esa inclinación enfermiza” y volverles al redil heterosexual. En 1994 Naciones Unidas emite una resolución para que los estados parte reconozcan que la discriminación de personas por diversa orientación sexual e identidad de género violenta el Pacto Internacional Sobre Derechos Civiles y Políticos. Aún así, todavía hay países que les castigan con pena de muerte o con privación de la libertad; a pesar de estas recomendaciones de los organismos multilaterales persisten actitudes de odio.


En México hay avances legales importantes; en 2001 se incluye en la Constitución el principio de no discriminación por “preferencia”, como un escueto avance el reconocimiento de los derechos de las personas de la comunidad LGBTTTI. No es sino hasta 2011 que se señala explícitamente la no discriminación por preferencias sexuales. Hoy hay acciones afirmativas para que compitan en las elecciones. Falta trabajar más para erradicar el estigma social y la discriminación que sufren en los ámbitos laborales y en los servicios de salud. La homofobia sigue cobrando muchas vidas de gays y trans.


Los partidos poco a poco avanzan en su inclusión en sus espacios de dirección y hoy estuvieron en las candidaturas a partir de una directriz del INE. Aplausos a las instituciones para prevenir la discriminación por sus acciones a favor de los derechos de homosexuales, lesbianas, bisexuales, transexuales, transgénero, trasvestis e intersexuales, e incluso queer.


¿Cuántas personas forman parte de esta comunidad? Me parece que no se podría tener un dato con certeza porque incluso muchos y muchas no lo dirían precisamente porque en la sociedad hay mucho prejuicio, los censos muestran que muchas familias no aceptan que alguno o alguna de sus integrantes se reconozcan no heterosexuales. Estar en el clóset en un opción que se asume sin bronca; pero también por conveniencia o por temor.


En México se realizó la marcha del Orgullo Gay; han regresado a las calles con el multicolor de la bandera del arcoíris nuevamente después de un año de pandemia. En la exigencia del ejercicio pleno de sus derechos, ahí estaremos siempre