CANNES. Nanni Moretti, el veterano realizador italiano, con una amplia parte de su filmografía estrenada y premiada aquí desde 1978 con “Ecche Bombo” y una Palma de oro en 2001 para “El cuarto del hijo” es el segundo de los tres cineastas italianos seleccionados en competencia este año en Cannes, siendo la tercera Alicia Rohrwacher con La Quimera, programada para el último día del certamen.
Moretti que a últimos tiempos ha decepcionado (Los tres pisos, 2021) parece haber dado esta vez con una temática interesante y desafiante en “Hacia un futuro promisorio” aparentemente inspirada en parte, como en sus filmes anteriores, de sus experiencias personales.
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Dejemos claro desde un principio que “Hacia un futuro…” no puede compararse con el excelente “Rapto” de su compatriota Marco Bellocchio presentada ayer. A pesar de esto, la última oferta de Moretti es mejor que “Los tres pisos” aunque el resultado final deja que desear. El director y guionista pretende armar un complejo cuadro de su vida y recorrido cinematográfico a través de la filmación de una película de la que él asume su realización y cuya temática interroga el itinerario del partido comunista italiano.
Mezclando el proceso del “cine dentro del cine”, los compromisos políticos y personales y un sutil sentido del humor ácido, Moretti pretende, tal y como lo señala el obviamente crítico título de su filme, ofrecer un resumen de vida, de su proceso creativo y de una visión personal y del contexto social. Si el resultado deja que desear se debe a la aparente incapacidad de Moretti de amalgamar todos estos elementos y procesos narrativos en algo convincente, quedándose dispersas por aquí y por allá secuencias emocionantes y de crítica acertada.
LA PROTESTA POR LA GUERRA
Siendo magra la cosecha en la competencia el día de hoy, esta sería una buena ocasión para referirse a otros aspectos del festival relacionados con el mundo real, fuera del bien cerrado y ficticio capullo del certamen de Cannes, por ejemplo el caso de Ucrania y la salvaje guerra de agresión rusa en el mero contexto de Europa.
Parecería que el tema ha pasado a segundo y tercer término si no fuera por la protesta, anoche en el tapete rojo del festival de una actriz ucraniana, vestida con los colores de su patria y empapada con una impresionante cantidad de sangre artificial… de cerca la llamada de los cineastas y ejecutivos fílmicos de aquel país para que productores, financieros y distribuidores presentes en el mayor Mercado Fílmico del mundo siguen boicoteando los intercambios con compañías de intereses rusos.
Es otro asunto, si efectivamente este boicot se realizó a lo largo del desarrollo del Mercado que concluye, resumiéndose según sus directivos a un éxito rotundo superior al periodo preCovid.
Parecería que muchas empresas fílmicas europeas y norteamericanas siguen sus transacciones con el lucrativo mercado ruso a través de compañías rusas que transfirieron sus sedes a países como Georgia, Armenia y otros.
REDUCIDA PRESENCIA DE MÉXICO
Entre la reducida presencia de México este año, -destaca la ausencia de nuevo de un stand del Imcine en el Mercado del Film-, fue discreta la respuesta positiva al estreno de la película de Amat Escalante “Perdidos en la noche” en la sección oficial Premiere.
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Mientras el festival francés de Annecy, anunció que el magno evento mundial de cine de animación, que México será el país invitado de honor en su celebración del 11 a 17 de Junio próximo.
Anotemos además el estreno por 102 Distribution en el Mercado del Film de “Presencias” el último film de Luis Mandoki, una coproducción de Videocine con la intervencion de Yalitza Aparicio y de Alberto Ammann en los papeles protagónicos.