Una de las figuras más recordadas por promover la ciencia con bromas y diversión se hizo presente en la quinta edición del Talent Land. Un pequeño fragmento de "El Mundo de Beakman" se presentó en el Expo Guadalajara, donde cientos de fanáticos de todas las edades disfrutaron la interpretación del actor Paul Zaloom, y el actor de doblaje Juan Carralero.
En este evento, el también titiritero salió caracterizado como el personaje que todos recordamos con una cabellera alborotada y la icónica bata verde para realizar diversas dinámicas con los asistentes, y que con ayuda del público, aprender diversos principios científicos como el punto de gravedad y el efecto Thatcher.
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Fue en 1992 que Paul Zaloom decidió ponerse en el papel de un científico loco en un programa infantil y a través de 91 episodios convirtió la ciencia en un tema que los niños pudieran comprender y aplicar mucho de lo aprendido en su casa.
Esta no es la primera ocasión que Zaloom visita nuestro país con el personaje de Beakman, pues en 2014 participó como conferencista en un evento de ciencias de la Universidad Nacional Autónoma de México, donde en palabras del actor, se sorprendió de la cantidad de fanáticos que tenía Beakman fuera de Estados Unidos, sobre todo en Latinoamérica.
"Cuando regrese a casa, recuerdo que le comente a mis amigos que Beakman era conocido fuera en otros países, y en otro idioma, pero ellos no me terminaron creyendo", señaló el actor en conferencia de prensa.
El secreto tras el éxito del Mundo de Beakman
Para Zaloom, una de las principales características para que el programa tuviera ese éxito en países como México, fue que al momento de enseñar a los niños un tema como la ciencia, el utilizar términos y ejemplos que ellos pudieran comprender más fácilmente con cosas de su entorno permitió que a los niños tuvieran más curiosidad por el universo.
"Tanto antes, como ahora, los niños son como una esponja que pueden aprender todo lo que les llame la atención, aunque ahora existan las computadoras, siempre habrá los libros".
El actor asegura que la curiosidad nunca dejará de estar no solo en los niños, sino en las personas, y herramientas como los museos y los libros de textos ayudan a alimentar la curiosidad del ser humano.
Recordando lo que hizo grande al programa, el actor señala que esto no podría repetirse en televisión debido al poco apoyo en el contenido infantil y al alto costo de una producción, pero con la llegada del internet, sería más sencillo transmitir este conocimiento científico a los menores de edad con nuevas plataformas de comunicación digital.
"Recuerdo, cuando grabe más de 20 programas en un solo día, fue muy pesado, debido a que hacer televisión es muy caro y complicado, pero en internet, cada vez es más sencillo un contenido con temas científicos", señalaba Zaloom.
"Actualmente, existen muchas corrientes para transmitir ciencia a los niños de forma más didáctica de juegos, videojuegos que sirven como una gran herramienta de comunicación de la ciencia en niños".
Al finalizar su presentación en Guadalajara, el actor caracterizado de científico invitó a todos los asistentes a nunca dejar de preguntar, y sobre todo, a responder esas preguntas para recordar el pensamiento crítico que su programa buscó incentivar en los niños de 1990.
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