De acuerdo con la Cepal, la pandemia tuvo un fuerte impacto en el empleo femenino, que se expresó en una importante reducción en la tasa de participación laboral. Tras registrarse que el 51.8% de las mujeres en edad laboral estaban trabajando en 2019, esta proporción cayó al 47.7% durante 2020. Al llegar el 2022, este indicador no ha regresado a los niveles prepandemia.