Durante 2021, la Autoridad Educativa Federal en la Ciudad de México (AEFCM) pagó más de nueve millones de pesos a 51 trabajadores de 21 centros de trabajo que en ese momento estaban clausurados en nóminas. Es decir que en estos inmuebles ya no trabajaba nadie y aun así les pagaron a empleados, reveló la Auditoría Superior de la Federación (ASF).
La ASF revisó una muestra de 35 mil 659 millones 342 mil pesos, que representó 87.8 por ciento de los 40 mil 609 millones 806 mil 900 pesos administrados por la Autoridad Educativa Federal en la Ciudad de México, mediante los recursos de las Previsiones y Aportaciones para los Sistemas de Educación Básica, Normal, Tecnológica y de Adultos del ejercicio fiscal 2021.
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Al 31 de diciembre de 2021, la AEFCM ejerció el 99.9 por ciento del monto asignado, por lo que 29 millones fueron reintegrados a la Tesorería de la Federación.
Dentro de los montos de “Servicios personales”, la Autoridad Educativa Federal en la Ciudad de México informó a la ASF que realizó cuatro millones 817 mil 907 pagos a 128 mil 550 personas, con un monto de 34 millones 873 mil 891.3 miles de pesos.
En este universo total, el órgano fiscalizador constató que la AEFCM realizó mil 542 pagos por nueve mil 78.7 miles de pesos (nueve millones 78 mil 700 pesos) a 52 personas quienes estaban adscritos en 21 centros de trabajo reportados como clausurados en las nóminas financiadas con recursos de las Previsiones y Aportaciones para los Sistemas de Educación Básica, Normal, Tecnológica y de Adultos del ejercicio fiscal 2021.
La Autoridad Educativa local no proporcionó la documentación justificativa y comprobatoria que acreditara la autorización de los pagos, lo cual contraviene a la Ley General de Educación.
“Se presume un probable daño o perjuicio, o ambos, a la Hacienda Pública Federal por un monto de nueve millones 68 mil setecientos cuatro pesos, más los intereses financieros generados desde su disposición hasta su reintegro a la Tesorería de la Federación, por realizar mil 542 pagos a 51 trabajadores, adscritos en 21 centros de trabajos reportados como clausurados”, detallaron.
A pesar del hallazgo, la ASF indicó que, una vez analizadas las evidencias documentales proporcionadas por la entidad fiscalizada, ésta obtuvo un promedio general de 100 puntos, en la evaluación, lo que la ubica en un nivel alto.
“En razón de lo expuesto, se considera que la entidad fiscalizada dispone de estrategias y mecanismos de control adecuados sobre el comportamiento de las actividades que se realizan en la operación, los cuales garantizan el cumplimiento de los objetivos, la observancia de la normativa y la transparencia, lo que le permite tener un sistema de control interno fortalecido, que consolida la cultura de control y la previsión de riesgos”, señala la auditoría.
No es la primera vez que la AECM tiene anomalías en cuanto a pagos a empleados.
En los resultados de la auditoría del ejercicio fiscal 2020, la ASF detectó que la Autoridad Educativa de la Ciudad de México gastó más de 67 millones de pesos para cubrir salarios de maestros que estaban dados de baja, que se reportaron inactivos, sin goce de sueldo y hasta muertos, en el año en el que la pandemia obligó al cierre de los salones de clases.
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El Sol de México reportó en su edición del 28 de marzo del 2022, que 67 millones 484 mil 976 pesos se destinaron a pagos improcedentes en los Sistemas de Educación Básica, Normal, Tecnológica y de Adultos.
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