/ jueves 25 de enero de 2024

Barbie brilla por su ausencia

Twitter: @cons_gentil

Ante la publicación de los nominados a los premios Óscares de 2024 una de las noticias más destacadas fue la ausencia de Barbie en algunas de las categorías más importantes, como Mejor Dirección (Greta Gerwig) y Mejor Actriz (Margot Robbie, quien también es productora). Y a pesar de que este fue un año extremadamente competitivo para la industria del cine, lo que más destaca es que Barbie fue nominada tanto para Mejor Guión Adaptado (Greta Gerwig y Noah Baumbach) como para Mejor Película. Incluso fue nominada para Mejor Actriz de Reparto (America Ferrera) y, lo que es aún más sorprendente, Mejor Actor de Reparto (Ryan Gosling). De manera que casi todo lo que involucró la película fue lo suficientemente reconocido (8 nominaciones en total) excepto las dos mujeres quienes tuvieron la mayor responsabilidad en la realización de la película.

Es bien sabido que tanto la premiación como las nominaciones de los Óscares suelen ser producto de polémica y opiniones encontradas. Este definitivamente no es el primer año en el que eso sucede. Sin embargo, lo que sucedió este año con Barbie ha destacado profundamente.

La película de Barbie tuvo un papel gigantesco en revertir la tendencia de salas de cine vacías y la decreciente audiencia de los Óscares, ya que, contra todo pronóstico, trajo a miles de millones de personas de vuelta a las salas de cine creando un verdadero fenómeno cultural. La película recaudó 1446 miles de millones de dólares en una época en que la mayoría de las personas comenzaban a decir que preferían ver películas en casa que en el cine. Greta Gerwig estableció un récord en Hollywood como la película más taquillera jamás dirigida por una mujer.

Lo primero que pensé al analizar por qué esto pudo haber sucedido con una película innegablemente exitosa fue que quizá el mensaje es tan profundo que quizá los miembros de la academia no lo entendieron. No obstante, según los datos más recientes, un enorme 67% de los miembros votantes son hombres y el 81% son blancos. Este tipo de sobrerrepresentación masculina blanca convierte a los Óscares en una de las instituciones culturales más sesgadas de la historia. Entonces, quizá sería más adecuado decir que no fue que no entendieran la trama, sino que aparentemente la trajeron (una vez más) al mundo real.

Y probablemente este suceso entraría a la historia como una película más que no obtuvo el suficiente reconocimiento por parte de la Academia si no fuera porque Ryan Gosling -mismo que sí obtuvo una nominación- emitiera un comunicado diciendo que “... No hay Ken sin Barbie, y no hay Barbie película sin Greta Gerwig y Margot Robbie, las dos personas mayormente responsables de esta histórica y célebre película. Ningún reconocimiento sería posible para nadie en la película sin su talento, valor y genialidad. Decir que estoy decepcionado de que no estén nominadas en sus respectivas categorías sería quedarse corto.”

Esta fue una declaración extremadamente significativa y que al mismo tiempo es posible gracias a la revolución cultural de la cual Barbie es parte. Su declaración visibiliza el patrón de reconocimiento de los hombres que es posible gracias a la labor de las mujeres, la cual pasa desapercibida la mayor parte de las veces.

Independientemente de lo que pueda pasar en la premiación, considero que Barbie ha sido un producto cultural que desató una revolución tan grande que es intangible. Quizá no nos es posible verlo ahora, pero unas cuantas estatuillas no serían suficiente para englobar el nivel de pertinencia que esta obra tiene -y seguirá teniendo- para el mundo en el que nos tocó vivir.

Twitter: @cons_gentil

Ante la publicación de los nominados a los premios Óscares de 2024 una de las noticias más destacadas fue la ausencia de Barbie en algunas de las categorías más importantes, como Mejor Dirección (Greta Gerwig) y Mejor Actriz (Margot Robbie, quien también es productora). Y a pesar de que este fue un año extremadamente competitivo para la industria del cine, lo que más destaca es que Barbie fue nominada tanto para Mejor Guión Adaptado (Greta Gerwig y Noah Baumbach) como para Mejor Película. Incluso fue nominada para Mejor Actriz de Reparto (America Ferrera) y, lo que es aún más sorprendente, Mejor Actor de Reparto (Ryan Gosling). De manera que casi todo lo que involucró la película fue lo suficientemente reconocido (8 nominaciones en total) excepto las dos mujeres quienes tuvieron la mayor responsabilidad en la realización de la película.

Es bien sabido que tanto la premiación como las nominaciones de los Óscares suelen ser producto de polémica y opiniones encontradas. Este definitivamente no es el primer año en el que eso sucede. Sin embargo, lo que sucedió este año con Barbie ha destacado profundamente.

La película de Barbie tuvo un papel gigantesco en revertir la tendencia de salas de cine vacías y la decreciente audiencia de los Óscares, ya que, contra todo pronóstico, trajo a miles de millones de personas de vuelta a las salas de cine creando un verdadero fenómeno cultural. La película recaudó 1446 miles de millones de dólares en una época en que la mayoría de las personas comenzaban a decir que preferían ver películas en casa que en el cine. Greta Gerwig estableció un récord en Hollywood como la película más taquillera jamás dirigida por una mujer.

Lo primero que pensé al analizar por qué esto pudo haber sucedido con una película innegablemente exitosa fue que quizá el mensaje es tan profundo que quizá los miembros de la academia no lo entendieron. No obstante, según los datos más recientes, un enorme 67% de los miembros votantes son hombres y el 81% son blancos. Este tipo de sobrerrepresentación masculina blanca convierte a los Óscares en una de las instituciones culturales más sesgadas de la historia. Entonces, quizá sería más adecuado decir que no fue que no entendieran la trama, sino que aparentemente la trajeron (una vez más) al mundo real.

Y probablemente este suceso entraría a la historia como una película más que no obtuvo el suficiente reconocimiento por parte de la Academia si no fuera porque Ryan Gosling -mismo que sí obtuvo una nominación- emitiera un comunicado diciendo que “... No hay Ken sin Barbie, y no hay Barbie película sin Greta Gerwig y Margot Robbie, las dos personas mayormente responsables de esta histórica y célebre película. Ningún reconocimiento sería posible para nadie en la película sin su talento, valor y genialidad. Decir que estoy decepcionado de que no estén nominadas en sus respectivas categorías sería quedarse corto.”

Esta fue una declaración extremadamente significativa y que al mismo tiempo es posible gracias a la revolución cultural de la cual Barbie es parte. Su declaración visibiliza el patrón de reconocimiento de los hombres que es posible gracias a la labor de las mujeres, la cual pasa desapercibida la mayor parte de las veces.

Independientemente de lo que pueda pasar en la premiación, considero que Barbie ha sido un producto cultural que desató una revolución tan grande que es intangible. Quizá no nos es posible verlo ahora, pero unas cuantas estatuillas no serían suficiente para englobar el nivel de pertinencia que esta obra tiene -y seguirá teniendo- para el mundo en el que nos tocó vivir.