Wishlist 2018

Por Aribel Contreras Suárez

Iniciamos el año 2018 con muchos propósitos personales y las empresas con objetivos para crecer y vender más. Sin embargo, me cuestiono cada año, qué es lo que los gobernantes se plantean para ser mejores funcionarios políticos y qué es lo que harán para hacer de su país algo mejor. Como se imaginarán, nunca encuentro respuesta.

Sin embargo, les dejo mi lista de deseos -mundiales y nacionales- para este 2018 con la ilusión de que, al menos, los Reyes Magos sí los lean.

1) Que la Organización de las Naciones Unidas haga algo más por lo cual fue creado originalmente: la paz mundial. Ahora se ha enfocado tanto a los Objetivos de Desarrollo Sostenible que para donde volteemos a ver, olemos la guerra.

2) Que el presidente estadounidense se asesore de gente inteligente para que le haga ver la directriz equivocada que tienen sus decisiones.

3) Que la comunidad internacional logre sostener a Jerusalén como zona internacional sin que Israel, ni Estados Unidos ni otros países violen el derecho internacional.

4) Que Corea del Norte se mantenga aislada sin hacer más pruebas nucleares.

5) Que Venezuela logre su libertad política y social.

6) Que la geopolítica se mueva hacia una nueva composición a favor de los países sin que esto genere más guerras frías o no frías.

7) Que el TLCAN versión 2 concluya exitosamente en 10 rondas en el 2018.

8) Que la renegociación del Tratado de Libre Comercio Unión Europea-México concluya dentro del primer semestre del 2018.

9) Que las elecciones presidenciales de México ocurran en un ambiente de ética y transparencia, sin fraudes.

10) Que el presidente electo en México sea honesto, incorruptible y logre hacer por nuestro país una potencia económica a nivel mundial.

11) Que no haya más casos de tortura, feminicidios, robos, corrupción ni sobornos en nuestro país.

12) Que las políticas públicas estén encaminadas a mejorar el nivel de vida de los mexicanos.

Si tuviéramos un Melchor en la actualidad, le pediría que entregara la mirra a Corea del Norte y a Estados Unidos para que, en su significado de ser el “símbolo del hombre”, llamara a la buena conciencia de los mandatarios de ambos países.

Si hubiera un Gaspar hoy en día, le diría que el incienso lo llevara a Jerusalén para que con su representación de ser el “símbolo de Dios”, traiga de nuevo el statu quo que había antes del “Trump effect”.

Si existiera un Baltasar, le diría que entregara el oro que carga para que al simbolizar al “rey”, haga que con dicho metal precioso se acabara la pobreza que prevalece en el mundo.

Y ustedes… ¿qué le pedirían a los Reyes Magos para este 6 de enero?

Coordinadora

Licenciatura en Administración de Negocios Internacionales

Departamento de Estudios Empresariales

Universidad Iberoamericana

Experta en asuntos internacionales

aribelcontreras@ibero.mx

@aribel007