/ viernes 19 de agosto de 2016

El Observador Parlamentario

  • Antonio Tenorio Adame
  • Bloquear inicio de clases, laberinto sin salida
  • La Conade; despojó el “honor nacional”

La Comisión Permanente, durante su sesión del miércoles, ejerció su capacidad de fiscalizar y control sobre las políticas del Gobierno.

Entre ellas, los resultados de la delegación mexicana en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro. Se pidieron informes, la comparecencia de Alfredo del Castillo y aun su destitución. El tema cubre todos los poros sensibles del público, en la pasión.

No obstante la emoción desbordada por las (in)competencias deportivas, priva la incertidumbre del retorno pacífico a clases el próximo lunes, dado que la CNTE insiste en sabotearlas hasta conseguir que la Reforma Educativa evaluatoria sea derogada. La tensión llega al punto de ruptura con inminencia de la represión generalizada.

Respecto a la radical insistencia de derogar la Ley, se dice que la movilización opositora reconoce la fatalidad de las reformas regresivas, de la globalidad, que siempre terminan por aplicarse. Aunque, por otra parte, la derogación tampoco es garantía. Es, al parecer un laberinto sin salida

CONADE BAJO RECLAMO. Se requiere conocer el proceso de selección de los competidores, reuniones con el titular de la Conade y las federaciones, así como solicitar a la Auditoría Superior de la Federación audite a dichos organismos.

El senador Miguel Barbosa pidió la destitución del titular de la Conade, por su “mala administración” y reclamó “políticas de Estado” en materia deportiva; respecto a su desempeño personal señaló, el legislador, que el titular de la Conade carece de atributos porque su desempeño ha sido en el Ministerio Público; estimó conveniente su comparecencia a fin de ejercer su defensa.

La propuesta del coordinador del PRD se extendió a formar una Comisión especial con las Cámaras del Congreso de la Unión, “con la participación del Ejecutivo Federal, de la federaciones, del Comité Olímpico mexicano, de la iniciativa privada, de la sociedad, lo que tiene que ser una nueva política de Estado en materia olímpica y deportiva”.

El debate de los Juegos Olímpicos revela el grado de pesimismo y frustración que priva en el país. El desaliento en el deporte desarticula el “llamado patriotismo deportivo”, no existe el “orgullo nacional” como consecuencia de la desaparición de la nación, cuyo proceso se agudizó desde la implantación del Tratado de Libre Comercio en la vorágine de la globalización.

VERACRUZ EN EXTREMA POBREZA fue el diagnóstico de la Tercera Comisión de la Permanente, por lo que recomiendan sea incluido en Zona Económica Especial, no deja de sorprender que una entidad de ese orden: fuente originaria de la riqueza nacional, entrada marítima de Europa, con un gran caudal petrolero, sea hoy ubicado con los Estados extremadamente miserables.

Si, la premisa de esa visión es válida, entonces el corolario resultante atrapa todo el país. No es exacto lo formal y lo ético lo impiden.

La ZEE es un concepto regional espacial derivado del proceso de un desarrollo asimétrico, por lo que se hace necesario restablecer el equilibrio en base al principio de subsidiaridad.

Por ética, la ZEE fue concebida por la exclusión que sufrieron las entidades del bajo sur; Guerrero, Oaxaca y Chiapas en los grandes proyectos de desarrollo nacional, primero la matriz territorial con orientación a Europa y luego con dirección a EU. El sur siempre fue excluido.

La razón política, siempre se apega a lo necesario. La formulación de la ZEE se originó en el Gobierno federal, como una respuesta de salida a la crisis de los desaparecidos de Ayotzinapa, cuya culminación se refleja en Nochixtlán, donde la realidad cruda de la violencia de Estado se ve atrapada por la resistencia secular de los pueblos indígenas mezclada con intereses corporativos de la CNTE.

En resumen; la ZEE es un artilugio del régimen federal por carecer de financiamiento.

  • Antonio Tenorio Adame
  • Bloquear inicio de clases, laberinto sin salida
  • La Conade; despojó el “honor nacional”

La Comisión Permanente, durante su sesión del miércoles, ejerció su capacidad de fiscalizar y control sobre las políticas del Gobierno.

Entre ellas, los resultados de la delegación mexicana en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro. Se pidieron informes, la comparecencia de Alfredo del Castillo y aun su destitución. El tema cubre todos los poros sensibles del público, en la pasión.

No obstante la emoción desbordada por las (in)competencias deportivas, priva la incertidumbre del retorno pacífico a clases el próximo lunes, dado que la CNTE insiste en sabotearlas hasta conseguir que la Reforma Educativa evaluatoria sea derogada. La tensión llega al punto de ruptura con inminencia de la represión generalizada.

Respecto a la radical insistencia de derogar la Ley, se dice que la movilización opositora reconoce la fatalidad de las reformas regresivas, de la globalidad, que siempre terminan por aplicarse. Aunque, por otra parte, la derogación tampoco es garantía. Es, al parecer un laberinto sin salida

CONADE BAJO RECLAMO. Se requiere conocer el proceso de selección de los competidores, reuniones con el titular de la Conade y las federaciones, así como solicitar a la Auditoría Superior de la Federación audite a dichos organismos.

El senador Miguel Barbosa pidió la destitución del titular de la Conade, por su “mala administración” y reclamó “políticas de Estado” en materia deportiva; respecto a su desempeño personal señaló, el legislador, que el titular de la Conade carece de atributos porque su desempeño ha sido en el Ministerio Público; estimó conveniente su comparecencia a fin de ejercer su defensa.

La propuesta del coordinador del PRD se extendió a formar una Comisión especial con las Cámaras del Congreso de la Unión, “con la participación del Ejecutivo Federal, de la federaciones, del Comité Olímpico mexicano, de la iniciativa privada, de la sociedad, lo que tiene que ser una nueva política de Estado en materia olímpica y deportiva”.

El debate de los Juegos Olímpicos revela el grado de pesimismo y frustración que priva en el país. El desaliento en el deporte desarticula el “llamado patriotismo deportivo”, no existe el “orgullo nacional” como consecuencia de la desaparición de la nación, cuyo proceso se agudizó desde la implantación del Tratado de Libre Comercio en la vorágine de la globalización.

VERACRUZ EN EXTREMA POBREZA fue el diagnóstico de la Tercera Comisión de la Permanente, por lo que recomiendan sea incluido en Zona Económica Especial, no deja de sorprender que una entidad de ese orden: fuente originaria de la riqueza nacional, entrada marítima de Europa, con un gran caudal petrolero, sea hoy ubicado con los Estados extremadamente miserables.

Si, la premisa de esa visión es válida, entonces el corolario resultante atrapa todo el país. No es exacto lo formal y lo ético lo impiden.

La ZEE es un concepto regional espacial derivado del proceso de un desarrollo asimétrico, por lo que se hace necesario restablecer el equilibrio en base al principio de subsidiaridad.

Por ética, la ZEE fue concebida por la exclusión que sufrieron las entidades del bajo sur; Guerrero, Oaxaca y Chiapas en los grandes proyectos de desarrollo nacional, primero la matriz territorial con orientación a Europa y luego con dirección a EU. El sur siempre fue excluido.

La razón política, siempre se apega a lo necesario. La formulación de la ZEE se originó en el Gobierno federal, como una respuesta de salida a la crisis de los desaparecidos de Ayotzinapa, cuya culminación se refleja en Nochixtlán, donde la realidad cruda de la violencia de Estado se ve atrapada por la resistencia secular de los pueblos indígenas mezclada con intereses corporativos de la CNTE.

En resumen; la ZEE es un artilugio del régimen federal por carecer de financiamiento.