/ martes 1 de diciembre de 2020

Ajo y Agua | Sembró confianza y cosecha éxito

Después de dos años, los Pumas de la UNAM volverán a disputar las semifinales del futbol mexicano. Lo harán como resultado de un arduo trabajo, que comenzó prácticamente desde cero, con el cambio de directiva, la salida de jugadores con etiqueta de intocables, así como plena confianza en un proyecto a corto, mediano y largo plazo, que incluye hacer resurgir a su cantera.

No hay secretos, aunque sí una fórmula para el gran paso que los Pumas de la UNAM han tenido en el Torneo Guard1anes 2020, en el que disputarán las semifinales, después de dos años, frente al Cruz Azul, en un emocionante duelo capitalino, que promete gran espectáculo ofensivo por la forma en que están jugando ambos equipos.

Con ocho victorias, una sola derrota y ocho empates, los dirigidos por el argentino Andrés Lillini han impuesto condiciones en el futbol mexicano.

Ubicados en la segunda posición de la clasificación, los Pumas de la UNAM dejaron atrás la fase regular del Torneo Guard1anes 2020 para abrirse paso en los duelos de eliminación directa.

El primer obstáculo a superar fueron los Tuzos de Pachuca, y aunque batallaron, el objetivo está cumplido, por lo que a partir de ahora habrá que ser más incisivos y certeros en el ataque para sufrir menos en la labor defensiva.

Empatar sin goles en el partido de vuelta dejó sabor amargo, sobre todo por lo mostrado en la fase regular.

Sin embargo, destaco la solidez defensiva del conjunto universitario para hacer valido el triunfo de 0-1 obtenido en el partido de ida, gracias, principalmente, al portero Julio González, quien han reemplazado de manera excelente al lesionado Alfredo Talavera.

También me gusta la seguridad que Lillini transmite a sus jugadores, al asegurar que el equipo llegará a la final y que peleará por el título.

Lo anterior no es vender espejitos, sino estar convencido del trabajo que se ha hecho día a día, en cada entrenamiento. Lillini no se conforma y estoy seguro de que veremos una propuesta más agresiva, el próximo jueves, en el duelo de ida frente a Cruz Azul.

Para ello habrá que trabajar el aspecto mental, ya que serán 180 minutos sumamente desgastantes.

De esa constancia surge la capacidad para sobreponerse, solucionar e incluso provocar ciertas acciones sobre el terreno de juego, como, por ejemplo, un penalti, una jugada a balón parado o un autogol del contrario.

La suerte del campeón, famosa frase en el ámbito deportivo, hace referencia a la constancia, a la capacitación y la actitud ganadora, que va más allá de la habilidad o calidad de los jugadores, porque cuando un equipo cree en su suerte, es decir en el trabajo que ha realizado a diario, el aspecto motivacional entra para suplir las carencias o puntos débiles que cualquier conjunto puede llegar a tener.

En los Pumas de la UNAM todos los involucrados creen plenamente en un proyecto marcado a corto, mediano y largo plazo, que ha sido eficazmente vigilado por Jesús Ramírez, presidente deportivo del club.

Chucho diseñó un plantel para pelear, a mediano plazo, por el título de la Liga MX; y hoy el tiempo le da la razón.

No pudo evitar la salida de mi ex compañero en el Real Madrid, Míchel González; pero acertó al darle entera confianza a Lillini, quien ha sabido dar continuidad a dicho proyecto, pese a que fue presentado sólo dos días antes de que iniciara el Guardianes 2020.

En su primera experiencia como técnico de Primera División, el argentino ya metió a los Pumas a las semifinales, y ahora tiene la misión de guiarlos a la final, a la que el conjunto universitario no accede desde hace cinco años.

Los cambios a veces son inevitables, pero siempre deben aprovecharse al máximo para reforzar al equipo o para solucionar algunas fallas.

Así es como los Pumas van camino al título, convertido en la segunda mejor ofensiva del torneo, con 29 tantos, de los cuales, 10 han sido anotados por el argentino Juan Ignacio Dinenno y cinco por el paraguayo Carlos González.

¡Que te lo digo yo!

Después de dos años, los Pumas de la UNAM volverán a disputar las semifinales del futbol mexicano. Lo harán como resultado de un arduo trabajo, que comenzó prácticamente desde cero, con el cambio de directiva, la salida de jugadores con etiqueta de intocables, así como plena confianza en un proyecto a corto, mediano y largo plazo, que incluye hacer resurgir a su cantera.

No hay secretos, aunque sí una fórmula para el gran paso que los Pumas de la UNAM han tenido en el Torneo Guard1anes 2020, en el que disputarán las semifinales, después de dos años, frente al Cruz Azul, en un emocionante duelo capitalino, que promete gran espectáculo ofensivo por la forma en que están jugando ambos equipos.

Con ocho victorias, una sola derrota y ocho empates, los dirigidos por el argentino Andrés Lillini han impuesto condiciones en el futbol mexicano.

Ubicados en la segunda posición de la clasificación, los Pumas de la UNAM dejaron atrás la fase regular del Torneo Guard1anes 2020 para abrirse paso en los duelos de eliminación directa.

El primer obstáculo a superar fueron los Tuzos de Pachuca, y aunque batallaron, el objetivo está cumplido, por lo que a partir de ahora habrá que ser más incisivos y certeros en el ataque para sufrir menos en la labor defensiva.

Empatar sin goles en el partido de vuelta dejó sabor amargo, sobre todo por lo mostrado en la fase regular.

Sin embargo, destaco la solidez defensiva del conjunto universitario para hacer valido el triunfo de 0-1 obtenido en el partido de ida, gracias, principalmente, al portero Julio González, quien han reemplazado de manera excelente al lesionado Alfredo Talavera.

También me gusta la seguridad que Lillini transmite a sus jugadores, al asegurar que el equipo llegará a la final y que peleará por el título.

Lo anterior no es vender espejitos, sino estar convencido del trabajo que se ha hecho día a día, en cada entrenamiento. Lillini no se conforma y estoy seguro de que veremos una propuesta más agresiva, el próximo jueves, en el duelo de ida frente a Cruz Azul.

Para ello habrá que trabajar el aspecto mental, ya que serán 180 minutos sumamente desgastantes.

De esa constancia surge la capacidad para sobreponerse, solucionar e incluso provocar ciertas acciones sobre el terreno de juego, como, por ejemplo, un penalti, una jugada a balón parado o un autogol del contrario.

La suerte del campeón, famosa frase en el ámbito deportivo, hace referencia a la constancia, a la capacitación y la actitud ganadora, que va más allá de la habilidad o calidad de los jugadores, porque cuando un equipo cree en su suerte, es decir en el trabajo que ha realizado a diario, el aspecto motivacional entra para suplir las carencias o puntos débiles que cualquier conjunto puede llegar a tener.

En los Pumas de la UNAM todos los involucrados creen plenamente en un proyecto marcado a corto, mediano y largo plazo, que ha sido eficazmente vigilado por Jesús Ramírez, presidente deportivo del club.

Chucho diseñó un plantel para pelear, a mediano plazo, por el título de la Liga MX; y hoy el tiempo le da la razón.

No pudo evitar la salida de mi ex compañero en el Real Madrid, Míchel González; pero acertó al darle entera confianza a Lillini, quien ha sabido dar continuidad a dicho proyecto, pese a que fue presentado sólo dos días antes de que iniciara el Guardianes 2020.

En su primera experiencia como técnico de Primera División, el argentino ya metió a los Pumas a las semifinales, y ahora tiene la misión de guiarlos a la final, a la que el conjunto universitario no accede desde hace cinco años.

Los cambios a veces son inevitables, pero siempre deben aprovecharse al máximo para reforzar al equipo o para solucionar algunas fallas.

Así es como los Pumas van camino al título, convertido en la segunda mejor ofensiva del torneo, con 29 tantos, de los cuales, 10 han sido anotados por el argentino Juan Ignacio Dinenno y cinco por el paraguayo Carlos González.

¡Que te lo digo yo!