/ sábado 7 de septiembre de 2019

Becas y argucias

El segmento de la juventud representa un área de oportunidades por el potencial de su demanda. Por ejemplo: el acceso a las instituciones educativas privadas, a los productos y servicios propios de su interés. En sus extremos, el no deseado consumo de alcohol y sustancias psicoactivas, participación en grupos antisociales. Destacan los ámbitos positivos del dinámico navegar en búsqueda del sentido de vida.

En unos casos y momentos, se observa, que el alto desempeño académico no está entre sus prioridades. Por ello, sus padres y el gobierno deciden apoyarlos hasta que les “caiga el veinte”. Por supuesto, con dirección, límites y buenos ejemplos. En este contexto, el colectivo reconoce la expresión que aplica a un grupo de jóvenes: “estudian en universidades particulares porque no tienen otra opción”. Tema de mercados cautivos.

Un caso. La familia de joven de nivel de preparatoria comenta: “no pudo ingresar a una institución oficial por su bajo desempeño colegial. Para frenar su deserción escolar, espera de un año, y que se integrara al grupo de los jóvenes que “ni estudian ni trabajan”, decidimos inscribirlo en una escuela particular. El criterio de selección, entre otros, el económico (el importe de colegiatura mensual y porcentaje de beca ofrecido en el primer año)”;

- “En el 2º año, la escuela disminuyó el porcentaje otorgado de beca por el bajo rendimiento académico, significando a la familia que los pagos mensuales aumentaran y la esperanza que con buenas calificaciones la posibilidad de recuperar beca el año siguiente. La situación no se modificó”.

Al concluir la preparatoria. ¿Todos ganaron?, una respuesta sería: el joven se graduó de la preparatoria en su tiempo y forma, la escuela logró sus objetivos de utilidad, pero, el sostén económico afectó su poder adquisitivo al pasar del 25 %, 15 % y terminar con el 5 % de beca.

Del ofrecer una beca conociendo el perfil del joven ¿la responsabilidad social de la escuela, fue real o una argucia para incrementar su población escolar? La respuesta se inclina a una estrategia de captación de alumnos, cumpliendo con los requisitos. En la cultura de las organizaciones existen también las de buenas prácticas.

Es del dominio público, que el caso anterior, no es único. Padres relatan sus experiencias que impactaron su presupuesto familiar. Entonces. ¿Qué componentes debe tener una fórmula de las becas ofrecidas por las escuelas particulares para que todos ganen?

Una muestra de buena voluntad. El documento de La Comisión Mixta de Becas para Escuelas con Estudios Incorporados a la UNAM del Programa Becas UNAM-SI del ciclo escolar 2019-2020.

www.dgire.unam.mx/contenido_wp/inicio-del-programa-de-becas-unam-si-2019-2020/

“La beca se otorgará por un año escolar. Su renovación será automática siempre y cuando el becario:

a. Continúe inscrito en la misma sede (…).

b. Curse el mismo nivel de estudios o carrera.

c. Sea alumno regular con promedio mínimo de 8.

d. No haya cometido faltas académicas, administrativas ni de disciplina escolar graves previstas en el reglamento interno…”

La sociedad requiere de un cambio de paradigma. Se percibe por los antecedentes glosados que vale la pena revisar los criterios para otorgar becas con base: A) la responsabilidad social de las instituciones educativas; B) el objetivo deseado para los jóvenes considerando su perfil temporal; y C) la familia tenga la tranquilidad que su presupuesto será vigente durante la preparatoria o universidad. Oportunidad de corresponsabilidad.

hazael.ruiz@hotmail.com


El segmento de la juventud representa un área de oportunidades por el potencial de su demanda. Por ejemplo: el acceso a las instituciones educativas privadas, a los productos y servicios propios de su interés. En sus extremos, el no deseado consumo de alcohol y sustancias psicoactivas, participación en grupos antisociales. Destacan los ámbitos positivos del dinámico navegar en búsqueda del sentido de vida.

En unos casos y momentos, se observa, que el alto desempeño académico no está entre sus prioridades. Por ello, sus padres y el gobierno deciden apoyarlos hasta que les “caiga el veinte”. Por supuesto, con dirección, límites y buenos ejemplos. En este contexto, el colectivo reconoce la expresión que aplica a un grupo de jóvenes: “estudian en universidades particulares porque no tienen otra opción”. Tema de mercados cautivos.

Un caso. La familia de joven de nivel de preparatoria comenta: “no pudo ingresar a una institución oficial por su bajo desempeño colegial. Para frenar su deserción escolar, espera de un año, y que se integrara al grupo de los jóvenes que “ni estudian ni trabajan”, decidimos inscribirlo en una escuela particular. El criterio de selección, entre otros, el económico (el importe de colegiatura mensual y porcentaje de beca ofrecido en el primer año)”;

- “En el 2º año, la escuela disminuyó el porcentaje otorgado de beca por el bajo rendimiento académico, significando a la familia que los pagos mensuales aumentaran y la esperanza que con buenas calificaciones la posibilidad de recuperar beca el año siguiente. La situación no se modificó”.

Al concluir la preparatoria. ¿Todos ganaron?, una respuesta sería: el joven se graduó de la preparatoria en su tiempo y forma, la escuela logró sus objetivos de utilidad, pero, el sostén económico afectó su poder adquisitivo al pasar del 25 %, 15 % y terminar con el 5 % de beca.

Del ofrecer una beca conociendo el perfil del joven ¿la responsabilidad social de la escuela, fue real o una argucia para incrementar su población escolar? La respuesta se inclina a una estrategia de captación de alumnos, cumpliendo con los requisitos. En la cultura de las organizaciones existen también las de buenas prácticas.

Es del dominio público, que el caso anterior, no es único. Padres relatan sus experiencias que impactaron su presupuesto familiar. Entonces. ¿Qué componentes debe tener una fórmula de las becas ofrecidas por las escuelas particulares para que todos ganen?

Una muestra de buena voluntad. El documento de La Comisión Mixta de Becas para Escuelas con Estudios Incorporados a la UNAM del Programa Becas UNAM-SI del ciclo escolar 2019-2020.

www.dgire.unam.mx/contenido_wp/inicio-del-programa-de-becas-unam-si-2019-2020/

“La beca se otorgará por un año escolar. Su renovación será automática siempre y cuando el becario:

a. Continúe inscrito en la misma sede (…).

b. Curse el mismo nivel de estudios o carrera.

c. Sea alumno regular con promedio mínimo de 8.

d. No haya cometido faltas académicas, administrativas ni de disciplina escolar graves previstas en el reglamento interno…”

La sociedad requiere de un cambio de paradigma. Se percibe por los antecedentes glosados que vale la pena revisar los criterios para otorgar becas con base: A) la responsabilidad social de las instituciones educativas; B) el objetivo deseado para los jóvenes considerando su perfil temporal; y C) la familia tenga la tranquilidad que su presupuesto será vigente durante la preparatoria o universidad. Oportunidad de corresponsabilidad.

hazael.ruiz@hotmail.com