/ sábado 25 de mayo de 2024

China, energía y políticas ambientales: Retos de México en revisión del T-MEC en 2026

A dos años de que se lleve a cabo la primera revisión del acuerdo comercial entre México, Estados Unidos y Canadá, nuestro país ya tiene “pistas” sobre los temas en los que tendrá que trabajar para asegurar que este tratado continúe otros 10 años.

Y es que, hace unos días, las ministras de comercio de los tres países sostuvieron en Phoenix, el cuarto encuentro de la Comisión de Libre Comercio del TMEC, y aunque no hubo confrontaciones, sí hicieron referencias indirectas sobre los temas más “espinosos”.

Entre éstos se encuentran la disputa por la política energética mexicana y la incómoda presencia de China en nuestro país, así como la falta de implementación de políticas en materia ambiental, asuntos que, de no tomar otro rumbo, podrían incluirse en la revisión del Tratado que se realizará el 1 de julio del 2026.

Es de destacar que la reunión se celebró una semana después de que el gobierno de Joe Biden anunciara altos aranceles para una gama de bienes de origen chino.

Y en el encuentro, la representante comercial de Estados Unidos, Katherine Tai, expresó “preocupación por que China utilice a México como trampolín” para acceder al mercado estadounidense evitando los aranceles y hasta sugirió que no descartan medidas en contra de nuestro país si no limitamos la inversión con Pekín.

Mientras que la ministra canadiense de Promoción de Exportaciones, Comercio Internacional y Desarrollo Económico de Canadá, Mary Ng, fue más clara y enérgica al plantear las “inquietudes de su país sobre las políticas de México en materia de energía renovable, minería y la Ley General de la Alimentación Adecuada y Sostenible”.

Así que es previsible que la revisión del T-MEC en el 2026 en lo que se refiere a Estados Unidos, se centrará en ajustes orientados a posicionar la región de América del Norte frente a China, entre otros puntos.

En tanto, la secretaria de Economía de México, Raquel Buenrostro, destacó que las secretarias coincidieron en que se cuenta con un Tratado con mecanismos progresistas que permiten una constante evolución en el comercio entre los tres países.

"Las funcionarias abrieron el diálogo con líderes de sindicatos porque, señalaron, es la mejor forma de conocer cómo está beneficiando el T-MEC a los trabajadores y, también, saber dónde hay más oportunidades", precisó.

En la revisión del T-MEC, México también tiene asuntos que poner sobre la mesa y en caso de continuar el actual régimen bajo la figura de Claudia Sheinbaum y de que ella siga en la línea de Andrés Manuel López Obrador, unos de éstos podrían ser la negativa de nuestro gobierno a la importación del maíz transgénico y los fertilizantes, así como la insistencia en defender la soberanía energética y de privilegiar a las empresas del Estado.

Así como nuevas medidas para el ingreso de ciudadanos canadienses a nuestro país, en respuesta al nuevo visado de entrada para los mexicanos a Canadá, que entró en vigor a partir del 29 de febrero de este año.

Por lo pronto, en este encuentro las ministras ordenaron a los Comités que redoblen sus esfuerzos para avanzar en la plena implementación del Tratado para ayudar a garantizar que la economía de América del Norte continúe sirviendo como modelo de competitividad y un crecimiento robusto, generalizado y equitativo.

Además, acordaron ampliar conjuntamente su colaboración para examinar cuestiones relacionadas con políticas y prácticas de no mercado de otros países, las cuales menoscaban al T-MEC y dañan a los trabajadores mexicanos, estadounidenses y canadienses, incluyendo en el sector automotriz, entre otros.

Así que, a 164 días para que se realicen elecciones presidenciales en Estados Unidos y a ocho, para que México elija a su próximo gobierno, “las señales”, para nuestro país ya son claras respecto a los temas en los que, ya sea Claudia Sheinbaum, Xóchitl Gálvez o Jorge Álvarez Máynez tendrán que hacer un cambio de rumbo, a fin de que el T-MEC se mantenga otros 10 años. Estaremos atentos.

A dos años de que se lleve a cabo la primera revisión del acuerdo comercial entre México, Estados Unidos y Canadá, nuestro país ya tiene “pistas” sobre los temas en los que tendrá que trabajar para asegurar que este tratado continúe otros 10 años.

Y es que, hace unos días, las ministras de comercio de los tres países sostuvieron en Phoenix, el cuarto encuentro de la Comisión de Libre Comercio del TMEC, y aunque no hubo confrontaciones, sí hicieron referencias indirectas sobre los temas más “espinosos”.

Entre éstos se encuentran la disputa por la política energética mexicana y la incómoda presencia de China en nuestro país, así como la falta de implementación de políticas en materia ambiental, asuntos que, de no tomar otro rumbo, podrían incluirse en la revisión del Tratado que se realizará el 1 de julio del 2026.

Es de destacar que la reunión se celebró una semana después de que el gobierno de Joe Biden anunciara altos aranceles para una gama de bienes de origen chino.

Y en el encuentro, la representante comercial de Estados Unidos, Katherine Tai, expresó “preocupación por que China utilice a México como trampolín” para acceder al mercado estadounidense evitando los aranceles y hasta sugirió que no descartan medidas en contra de nuestro país si no limitamos la inversión con Pekín.

Mientras que la ministra canadiense de Promoción de Exportaciones, Comercio Internacional y Desarrollo Económico de Canadá, Mary Ng, fue más clara y enérgica al plantear las “inquietudes de su país sobre las políticas de México en materia de energía renovable, minería y la Ley General de la Alimentación Adecuada y Sostenible”.

Así que es previsible que la revisión del T-MEC en el 2026 en lo que se refiere a Estados Unidos, se centrará en ajustes orientados a posicionar la región de América del Norte frente a China, entre otros puntos.

En tanto, la secretaria de Economía de México, Raquel Buenrostro, destacó que las secretarias coincidieron en que se cuenta con un Tratado con mecanismos progresistas que permiten una constante evolución en el comercio entre los tres países.

"Las funcionarias abrieron el diálogo con líderes de sindicatos porque, señalaron, es la mejor forma de conocer cómo está beneficiando el T-MEC a los trabajadores y, también, saber dónde hay más oportunidades", precisó.

En la revisión del T-MEC, México también tiene asuntos que poner sobre la mesa y en caso de continuar el actual régimen bajo la figura de Claudia Sheinbaum y de que ella siga en la línea de Andrés Manuel López Obrador, unos de éstos podrían ser la negativa de nuestro gobierno a la importación del maíz transgénico y los fertilizantes, así como la insistencia en defender la soberanía energética y de privilegiar a las empresas del Estado.

Así como nuevas medidas para el ingreso de ciudadanos canadienses a nuestro país, en respuesta al nuevo visado de entrada para los mexicanos a Canadá, que entró en vigor a partir del 29 de febrero de este año.

Por lo pronto, en este encuentro las ministras ordenaron a los Comités que redoblen sus esfuerzos para avanzar en la plena implementación del Tratado para ayudar a garantizar que la economía de América del Norte continúe sirviendo como modelo de competitividad y un crecimiento robusto, generalizado y equitativo.

Además, acordaron ampliar conjuntamente su colaboración para examinar cuestiones relacionadas con políticas y prácticas de no mercado de otros países, las cuales menoscaban al T-MEC y dañan a los trabajadores mexicanos, estadounidenses y canadienses, incluyendo en el sector automotriz, entre otros.

Así que, a 164 días para que se realicen elecciones presidenciales en Estados Unidos y a ocho, para que México elija a su próximo gobierno, “las señales”, para nuestro país ya son claras respecto a los temas en los que, ya sea Claudia Sheinbaum, Xóchitl Gálvez o Jorge Álvarez Máynez tendrán que hacer un cambio de rumbo, a fin de que el T-MEC se mantenga otros 10 años. Estaremos atentos.