/ sábado 21 de noviembre de 2020

Disco duro | Abuso sexual infantil

México ocupa el primer lugar mundial en abuso sexual infantil, según la OCDE.


Los principales agresores sexuales de niñas, niños y adolescentes son familiares, seguidos de maestros y sacerdotes, de acuerdo con el Consejo Ciudadano de la Ciudad de México.

En México, de mil casos de abuso, sólo se denuncian ante la justicia 100, de esos, sólo 10 van a juicio y de ahí, solo uno llega a condena. Es decir, la impunidad es de 99% y la cifra negra, aún mayor, considera el INEGI.

Por entidad federativa, los estados que presentan los mayores porcentajes de niñas que han sido abusados por sus familiares son: Oaxaca12.2%, Guerrero 13%, Michoacán 13.7% y Chiapas 13.8% de los casos.

Con esos terribles números llegó el país al 19 de noviembre pasado, Día Mundial para la Prevención del Abuso contra los Niños, Niñas y Adolescentes. ¿Qué hacer?

Hay ambiciosas inciativas de la sociedad civil como el programa Alumbra Contigo, del Early Institute, dado a conocer en El Sol de México, que busca mediante su página Alumbramx.org, ser una herramienta de ayuda para las víctimas, fomentar la cultura de la denuncia y atacar la impunidad prevaleciente.

Además el jueves pasado se presentó en el Senado de la República una inciativa con proyecto de decreto por la que se adicionan artículos a la Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, en materia de protección contra los agresores sexuales.

Fue presentada por la senadora Josefina Vázquez Mota, quien entre varios temas propone la creación del “Registro Nacional de Personas Agresoras Sexuales de Niñas, Niños y Adolescentes”, con el propósito de poder identificar los nombres de los agresores sexuales de menores que han sido sentenciados y condenados.

También propone la creación de un Sistema Nacional de Protección Integral de los niños, niñas y adolescentes como una instancia a nivel nacional que promueva la creación de normas jurídicas homogéneas a favor de las niñas, niños y adolescentes, otorgando el mismo tratamiento a favor de la niñez, como el caso de los delitos sexuales cometidos en contra de los menores.

En materia de menores en situación de reclusión parental, la iniciativa contempla que las visitas de convivencia con sus hijas o hijos menores de edad, estén sujetas a las evaluaciones que se realicen al sentenciado de carácter médico, psicológico, psiquiátrico y cualquier otra que se requiera, para determinar el riesgo que representa la convivencia con los menores.

Es decir, iniciativas hay. Basta que haya verdadera voluntad política (y recursos) para hacerlas valer.


En el USB…


El tema de la violencia y los niños ha experimentado una fuerte prtesencia mediática en el último mes por dos hechos:

La presentación del libro “Un sicario en cada hijo te dio”, de la organización Reinserta, presidida por Saskia Niño de Rivera, que retrata los casos de menores de edad presos por haber cometido delitos de alto impacto. Historias que parecen impensables y revelan nuestra descomposicion como sociedad.

Pero también por los casos de niños asesinados y descuartizados en el Centro Histórico de la Ciudad de México, perpetrados por cárteles que controlan los negocios de drogas y extorsión. La demencia de los crímenes ha indignado a la sociedad y ha arrojado sórdidos detalles de la participación de menores en las mafias capitalinas.

México ocupa el primer lugar mundial en abuso sexual infantil, según la OCDE.


Los principales agresores sexuales de niñas, niños y adolescentes son familiares, seguidos de maestros y sacerdotes, de acuerdo con el Consejo Ciudadano de la Ciudad de México.

En México, de mil casos de abuso, sólo se denuncian ante la justicia 100, de esos, sólo 10 van a juicio y de ahí, solo uno llega a condena. Es decir, la impunidad es de 99% y la cifra negra, aún mayor, considera el INEGI.

Por entidad federativa, los estados que presentan los mayores porcentajes de niñas que han sido abusados por sus familiares son: Oaxaca12.2%, Guerrero 13%, Michoacán 13.7% y Chiapas 13.8% de los casos.

Con esos terribles números llegó el país al 19 de noviembre pasado, Día Mundial para la Prevención del Abuso contra los Niños, Niñas y Adolescentes. ¿Qué hacer?

Hay ambiciosas inciativas de la sociedad civil como el programa Alumbra Contigo, del Early Institute, dado a conocer en El Sol de México, que busca mediante su página Alumbramx.org, ser una herramienta de ayuda para las víctimas, fomentar la cultura de la denuncia y atacar la impunidad prevaleciente.

Además el jueves pasado se presentó en el Senado de la República una inciativa con proyecto de decreto por la que se adicionan artículos a la Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, en materia de protección contra los agresores sexuales.

Fue presentada por la senadora Josefina Vázquez Mota, quien entre varios temas propone la creación del “Registro Nacional de Personas Agresoras Sexuales de Niñas, Niños y Adolescentes”, con el propósito de poder identificar los nombres de los agresores sexuales de menores que han sido sentenciados y condenados.

También propone la creación de un Sistema Nacional de Protección Integral de los niños, niñas y adolescentes como una instancia a nivel nacional que promueva la creación de normas jurídicas homogéneas a favor de las niñas, niños y adolescentes, otorgando el mismo tratamiento a favor de la niñez, como el caso de los delitos sexuales cometidos en contra de los menores.

En materia de menores en situación de reclusión parental, la iniciativa contempla que las visitas de convivencia con sus hijas o hijos menores de edad, estén sujetas a las evaluaciones que se realicen al sentenciado de carácter médico, psicológico, psiquiátrico y cualquier otra que se requiera, para determinar el riesgo que representa la convivencia con los menores.

Es decir, iniciativas hay. Basta que haya verdadera voluntad política (y recursos) para hacerlas valer.


En el USB…


El tema de la violencia y los niños ha experimentado una fuerte prtesencia mediática en el último mes por dos hechos:

La presentación del libro “Un sicario en cada hijo te dio”, de la organización Reinserta, presidida por Saskia Niño de Rivera, que retrata los casos de menores de edad presos por haber cometido delitos de alto impacto. Historias que parecen impensables y revelan nuestra descomposicion como sociedad.

Pero también por los casos de niños asesinados y descuartizados en el Centro Histórico de la Ciudad de México, perpetrados por cárteles que controlan los negocios de drogas y extorsión. La demencia de los crímenes ha indignado a la sociedad y ha arrojado sórdidos detalles de la participación de menores en las mafias capitalinas.