/ sábado 20 de agosto de 2022

La moviola | The Offer: ¿Detrás de un gran éxito, hay cinismo? 

@lamoviola

Le haré una oferta que no podrá rechazar: Es una semana tranquila de estrenos cinematográficos, dónde entre lo más destacado está Peleando por mi vida, del más que efectivo veterano director Barry Levinson y se mantiene el hasta hoy éxito Blockbuster, Fiera (Baltasar Kōmarkur, 2022), qué tal que nos acercamos al cómico, mágico mundo del streaming para abordar una propuesta más que interesante: The Offer (Michael Tolkin, Niki Toscano, 2022).

En medio de escándalos y cambios en la industria, recordemos el triste caso de la recién cancelada Batgirl por Warner y HBO-MAX y el anuncio de la caída en suscriptores de Netflix, sobre todo la posible inclusión de anuncios, hay luz en un panorama digamos incierto, como está mucho de la industria del entretenimiento: The Offer, con la mano medio baja, es decir sin tanta publicidad ha logrado penetrar bien en el gusto de un público, perdón por lo snob, algo selecto.

La miniserie de 10 capítulos, se puede ver a través de Paramount Plus y si tiene Amazon, ya la hizo. ¿El tema? la épica realización de El Padrino (Coppola, 1972), desde su atropellado inicio, aún antes de la creación de la novela de Mario Puzzo, hasta dejar claro, el por qué es uno de los filmes más importantes en la historia del séptimo arte. Todo desde el género de la ficción, con sus respectivas licencias narrativas.

El relato, es desde la perspectiva del productor Albert S. Ruddy (Miles Teller), aunque vemos desfilar a una fauna de personajes, casi todos en carácter de cínica complacencia con sus excesos de fina sobre importancia.

Por supuesto, ahí está un endeudado en el juego Mario Puzo (Patrick Gallo), motivo que lo obliga –para ganar dinero rápido– a escribir un Best-Seller, en este caso El Padrino, comiendo pasta en una alberca y con la boca llena decirle a Ruddy: “no se me ocurre nada”, durante el proceso de creación del guión. Brando, Pacino, Coppola, Sinatra, en fin, todos los personajes importantes del filme pululan por ahí, pero el importante es Ruddy.

La serie se desarrolla entre el más absoluto regodeo de la cultura audiovisual, y es una mitificación-desmitificación del clásico.

Hay algo a la vez paródico del proceso creativo, que incluye a actores, ejecutivos, mafiosos, en estos últimos se exacerba el estereotipo, sobre todo al inicio, logrando muy buenos momentos.

Los tejes y manejes de la industria son un tema sin desperdicio para el público, y no es la primera vez que se tocan a nivel narrativo. Incluso hay un libro, El estudio: Un año en el infierno de la Fox (John Gregory Dunne), donde se cuenta la historia de la creación del mega éxito El planeta de los simios (Franklin Schaffner, 1969), cuando la Fox estaba en números rojos.

El punto es que The Offer, decanta por un sutil cinismo y ausencia de formalidad que no sólo mueve a cierta nostalgia sino a una curiosidad alegre y por fortuna en algún punto hasta mal sana.

Sin tanta carga publicitaria, como otras series que se convierten en tendencia, la serie tiene todos los elementos para convertirse en un clásico sin tener un aire pesado. La verdad es que es gozosa y una muy buena opción de entretenimiento.

La desmitificación, tan de moda, hasta eso, tiene su lado positivo.

Entre mafiosos y productores te veas.


@lamoviola

Le haré una oferta que no podrá rechazar: Es una semana tranquila de estrenos cinematográficos, dónde entre lo más destacado está Peleando por mi vida, del más que efectivo veterano director Barry Levinson y se mantiene el hasta hoy éxito Blockbuster, Fiera (Baltasar Kōmarkur, 2022), qué tal que nos acercamos al cómico, mágico mundo del streaming para abordar una propuesta más que interesante: The Offer (Michael Tolkin, Niki Toscano, 2022).

En medio de escándalos y cambios en la industria, recordemos el triste caso de la recién cancelada Batgirl por Warner y HBO-MAX y el anuncio de la caída en suscriptores de Netflix, sobre todo la posible inclusión de anuncios, hay luz en un panorama digamos incierto, como está mucho de la industria del entretenimiento: The Offer, con la mano medio baja, es decir sin tanta publicidad ha logrado penetrar bien en el gusto de un público, perdón por lo snob, algo selecto.

La miniserie de 10 capítulos, se puede ver a través de Paramount Plus y si tiene Amazon, ya la hizo. ¿El tema? la épica realización de El Padrino (Coppola, 1972), desde su atropellado inicio, aún antes de la creación de la novela de Mario Puzzo, hasta dejar claro, el por qué es uno de los filmes más importantes en la historia del séptimo arte. Todo desde el género de la ficción, con sus respectivas licencias narrativas.

El relato, es desde la perspectiva del productor Albert S. Ruddy (Miles Teller), aunque vemos desfilar a una fauna de personajes, casi todos en carácter de cínica complacencia con sus excesos de fina sobre importancia.

Por supuesto, ahí está un endeudado en el juego Mario Puzo (Patrick Gallo), motivo que lo obliga –para ganar dinero rápido– a escribir un Best-Seller, en este caso El Padrino, comiendo pasta en una alberca y con la boca llena decirle a Ruddy: “no se me ocurre nada”, durante el proceso de creación del guión. Brando, Pacino, Coppola, Sinatra, en fin, todos los personajes importantes del filme pululan por ahí, pero el importante es Ruddy.

La serie se desarrolla entre el más absoluto regodeo de la cultura audiovisual, y es una mitificación-desmitificación del clásico.

Hay algo a la vez paródico del proceso creativo, que incluye a actores, ejecutivos, mafiosos, en estos últimos se exacerba el estereotipo, sobre todo al inicio, logrando muy buenos momentos.

Los tejes y manejes de la industria son un tema sin desperdicio para el público, y no es la primera vez que se tocan a nivel narrativo. Incluso hay un libro, El estudio: Un año en el infierno de la Fox (John Gregory Dunne), donde se cuenta la historia de la creación del mega éxito El planeta de los simios (Franklin Schaffner, 1969), cuando la Fox estaba en números rojos.

El punto es que The Offer, decanta por un sutil cinismo y ausencia de formalidad que no sólo mueve a cierta nostalgia sino a una curiosidad alegre y por fortuna en algún punto hasta mal sana.

Sin tanta carga publicitaria, como otras series que se convierten en tendencia, la serie tiene todos los elementos para convertirse en un clásico sin tener un aire pesado. La verdad es que es gozosa y una muy buena opción de entretenimiento.

La desmitificación, tan de moda, hasta eso, tiene su lado positivo.

Entre mafiosos y productores te veas.