/ lunes 12 de julio de 2021

Pulso CDMX | Visibilizar

“Solo alguien que no lo vive, alguien que no le importa puede frivolizar y llamar a esto “casos puntuales”. Claro que importa lo que te dicen mientras te matan”. Eduardo Rubino – Presidente del Grupo Parlamentario de Más Madrid en la Asamblea de Madrid.

Hace un año, la Presidenta de la Comunidad de Madrid calificó las más de 300 agresiones reportadas por LGBTTTIfobia como “casos puntuales”. Hace unos días Samuel Luiz fue matado a golpe tras un ataque homofóbico en España, lo que provocó una indignación nacional e internacional.

En México, en los últimos 15 días fueron asesinadas al menos tres mujeres trans y algunas fueron encontradas con marcas de tortura. Pero estos crímenes de odio por cuestiones de orientación sexual o identidad de género que afectan particularmente a las mujeres trans y a los hombres gays con expresiones femeninas ni siquiera están reportados en un registro oficial por parte de las autoridades. Son considerados como un acto de odio más, con una tendencia a la normalización de la violencia. Cada año, organizaciones de la sociedad civil como Letra Ese o la Fundación Arco Iris recaban y denuncian los datos de una violencia invisibilizada.

La semana pasada, fue aprobada la Ley para el Reconocimiento y la Atención de las Personas LGBTTTI de la Ciudad de México que, a partir de los derechos garantizados por la Constitución de la Ciudad de México, visibiliza la necesidad de inclusión y respeto de las poblaciones diversas. Definiendo por ley los conceptos básicos en materia de diversidad e inclusión LGBTTTI+, contempla avances para las poblaciones LGBTTTI+ y obliga a las autoridades a impulsar acciones concretas ambiciosas. Entre ellas: la incorporación de contenidos sobre educación sexual, así como la capacitación de todo el personal docente, de salud, de la Fiscalía y de las alcaldías de la Ciudad en materia de diversidad sexual y de género; creación de una bolsa de trabajo; capacitación gratuita a empresas; créditos y acceso a vivienda social; impulso prioritario de becas de fomento artístico; creación y almacenamiento de un archivo histórico; creación de una unidad de atención LGBTTTI+ en cada alcaldía y habilitar espacios comunitarios dentro de sus bienes inmuebles; creación de un indicador de observancia de los derechos; se fortalece la Unidad de Atención a la Diversidad Sexual de la CDMX con perspectiva interinstitucional y creación de plazas específicas. Aún no se sabe el costo presupuestal y tampoco si habrá dinero para realizar lo prometido.

El sábado pasado se llevó a cabo la primera Marcha de Lxs Invisibles que promueve una exigencia de derechos más allá del papel, más allá de junio, denuncia “la hegemonía identitaria y blanqueada” del movimiento LGBTTTI+, la visión binaria del sistema, acuerpando como principales reivindicaciones el alto a la violencia y la olvidada iniciativa para el derecho a la identidad de las infancias trans por el Congreso de la Ciudad de México y en el ámbito federal.

Visibilizar la exclusión, la discriminación, la violencia, el racismo y luchar por la igualdad de derechos en la diversidad nos corresponde a todxs. La libertad de ser es una lucha colectiva. Solidarizarse y actuar la hará realidad. La lucha es cotidiana. “No hay orgullo si no hay ley para las infancias trans”.

“Solo alguien que no lo vive, alguien que no le importa puede frivolizar y llamar a esto “casos puntuales”. Claro que importa lo que te dicen mientras te matan”. Eduardo Rubino – Presidente del Grupo Parlamentario de Más Madrid en la Asamblea de Madrid.

Hace un año, la Presidenta de la Comunidad de Madrid calificó las más de 300 agresiones reportadas por LGBTTTIfobia como “casos puntuales”. Hace unos días Samuel Luiz fue matado a golpe tras un ataque homofóbico en España, lo que provocó una indignación nacional e internacional.

En México, en los últimos 15 días fueron asesinadas al menos tres mujeres trans y algunas fueron encontradas con marcas de tortura. Pero estos crímenes de odio por cuestiones de orientación sexual o identidad de género que afectan particularmente a las mujeres trans y a los hombres gays con expresiones femeninas ni siquiera están reportados en un registro oficial por parte de las autoridades. Son considerados como un acto de odio más, con una tendencia a la normalización de la violencia. Cada año, organizaciones de la sociedad civil como Letra Ese o la Fundación Arco Iris recaban y denuncian los datos de una violencia invisibilizada.

La semana pasada, fue aprobada la Ley para el Reconocimiento y la Atención de las Personas LGBTTTI de la Ciudad de México que, a partir de los derechos garantizados por la Constitución de la Ciudad de México, visibiliza la necesidad de inclusión y respeto de las poblaciones diversas. Definiendo por ley los conceptos básicos en materia de diversidad e inclusión LGBTTTI+, contempla avances para las poblaciones LGBTTTI+ y obliga a las autoridades a impulsar acciones concretas ambiciosas. Entre ellas: la incorporación de contenidos sobre educación sexual, así como la capacitación de todo el personal docente, de salud, de la Fiscalía y de las alcaldías de la Ciudad en materia de diversidad sexual y de género; creación de una bolsa de trabajo; capacitación gratuita a empresas; créditos y acceso a vivienda social; impulso prioritario de becas de fomento artístico; creación y almacenamiento de un archivo histórico; creación de una unidad de atención LGBTTTI+ en cada alcaldía y habilitar espacios comunitarios dentro de sus bienes inmuebles; creación de un indicador de observancia de los derechos; se fortalece la Unidad de Atención a la Diversidad Sexual de la CDMX con perspectiva interinstitucional y creación de plazas específicas. Aún no se sabe el costo presupuestal y tampoco si habrá dinero para realizar lo prometido.

El sábado pasado se llevó a cabo la primera Marcha de Lxs Invisibles que promueve una exigencia de derechos más allá del papel, más allá de junio, denuncia “la hegemonía identitaria y blanqueada” del movimiento LGBTTTI+, la visión binaria del sistema, acuerpando como principales reivindicaciones el alto a la violencia y la olvidada iniciativa para el derecho a la identidad de las infancias trans por el Congreso de la Ciudad de México y en el ámbito federal.

Visibilizar la exclusión, la discriminación, la violencia, el racismo y luchar por la igualdad de derechos en la diversidad nos corresponde a todxs. La libertad de ser es una lucha colectiva. Solidarizarse y actuar la hará realidad. La lucha es cotidiana. “No hay orgullo si no hay ley para las infancias trans”.