/ martes 2 de febrero de 2021

Ajo y Agua | Qué poca… paciencia

El torneo Guard1anes 2021 apenas comenzó y ya se habla de crisis en Chivas. Tanto así, que Víctor Manuel Vucetich camina sobre la tabla floja, no tanto por los resultados, sino por la presión mediática y la polémica que tanto daño le hacen al futbol mexicano, al interrumpir procesos a diestra y siniestra debido a la falta de paciencia.

Roma no se construyó en un día, y ojalá así lo entienda la directiva de las Chivas de Guadalajara para que el proceso de Víctor Manuel Vucetich siga su curso.

Es cierto que los resultados no han sido los esperados, con dos derrotas y dos empates en las primeras cuatro fechas del Torneo Guard1anes 2021. Sin embargo, no hay motivos para que se genere un ambiente de pánico, que lo único que provoca es que el equipo se llene de inseguridad y desconfianza.

Hace bien Ricardo Peláez, como el director deportivo del equipo, en aceptar que las cosas no marchan como se esperaban, pero sobre todo en respaldar al técnico que él mismo eligió como reemplazo de Luis Fernando Tena.

Vucetich es un técnico ganador, profesional y, además, mexicano, que quizá sea ese el problema, ya que tristemente hemos visto que en el futbol mexicano se le tiene más paciencia al técnico que viene del extranjero.

Chivas no ha ganado en lo que va de la temporada, pero aún es muy pronto para hacer un balance sobre el trabajo realizado por Vucetich, que, debemos recalcar, no se limita a lo que sólo vemos el día del partido.

Esto no se trata de tener confianza en el técnico, sino en el proyecto que el propio Ricardo Peláez ha puesto en marcha desde su llegada.

Ganarle el León el próximo lunes sería el fin de una racha de dos derrotas consecutivas, pero no la solución a los problemas que Chivas ha mostrado no sólo con Vucetich en este inicio de temporada, sino desde hace ya varios proyectos que, indebidamente, han sido cortados con la mano en la cintura.

Vucetich y Peláez pueden hacer un gran equipo en Chivas, pero para ello deben dejarlos trabajar tranquilos, incluso entre ellos, para que cada uno pueda cumplir con la parte que le corresponde.

Hasta ahora, los refuerzos no han estado a la altura de las exigencias, por lo que Víctor Manuel Vucetich necesita encontrar la forma de sacar provecho de los jóvenes para posteriormente consolidar su idea futbolística.

Chivas es uno de los equipos más importantes del futbol mexicano, pero debe entender que desde hace ya algunos años se encuentra en reconstrucción, así que tener paciencia será una de las claves para salga del bache en el que innegablemente se encuentra, pero insisto, no sólo ahora con Vucetich.

Quizá más labor de Ricardo Peláez sea regresarle la confianza a Oribe Peralta, uno de los refuerzos más sonados en los últimos años, pero que sólo ha anotado dos goles con Chivas; el último de ellos hace ya un año, el sábado 1 de febrero de 2020, cuando firmó el 2-0 ante el Atlético San Luis, que, no obstante rescató el empate en el último minuto.

Con 37 años de edad, Oribe ya no es goleador que fue en América, pero tiene mucha experiencia que aportar a los jóvenes talentos del equipo, como lo demostró en los Juegos Olímpicos de Berlín 2012, en los que México logró su primera medalla de oro.

En eso, Peláez, también delantero de América, Chivas y de la Selección de México, tiene mucha experiencia.

Entiende a la perfección el sentir de un jugador, porque lo fue; y entiende su papel ahora como director deportivo.

En América tuvo mucha paciencia con Miguel Herrera como técnico y los resultados se dieron con el paso del tiempo.

En Cruz Azul demostró ser leal a sus ideas y aunque no logró el título de la Liga MX, como muchos otros, dejó huella con la Copa MX y la Supercopa MX.

Con él en el cargo, Cruz Azul disputó la final del Apertura 2018 después de cinco años de ausencia y dejó atrás la amenaza del descenso, sin dejar de mencionar que impulsó a las fuerzas básicas, en un claro ejemplo de lo que puede hacer si se le deja trabajar.

Ojalá que Peláez también este convencido de que darle continuidad a Vucetich es, en este momento, la mejor de las opciones.

¡Que te lo digo yo!

El torneo Guard1anes 2021 apenas comenzó y ya se habla de crisis en Chivas. Tanto así, que Víctor Manuel Vucetich camina sobre la tabla floja, no tanto por los resultados, sino por la presión mediática y la polémica que tanto daño le hacen al futbol mexicano, al interrumpir procesos a diestra y siniestra debido a la falta de paciencia.

Roma no se construyó en un día, y ojalá así lo entienda la directiva de las Chivas de Guadalajara para que el proceso de Víctor Manuel Vucetich siga su curso.

Es cierto que los resultados no han sido los esperados, con dos derrotas y dos empates en las primeras cuatro fechas del Torneo Guard1anes 2021. Sin embargo, no hay motivos para que se genere un ambiente de pánico, que lo único que provoca es que el equipo se llene de inseguridad y desconfianza.

Hace bien Ricardo Peláez, como el director deportivo del equipo, en aceptar que las cosas no marchan como se esperaban, pero sobre todo en respaldar al técnico que él mismo eligió como reemplazo de Luis Fernando Tena.

Vucetich es un técnico ganador, profesional y, además, mexicano, que quizá sea ese el problema, ya que tristemente hemos visto que en el futbol mexicano se le tiene más paciencia al técnico que viene del extranjero.

Chivas no ha ganado en lo que va de la temporada, pero aún es muy pronto para hacer un balance sobre el trabajo realizado por Vucetich, que, debemos recalcar, no se limita a lo que sólo vemos el día del partido.

Esto no se trata de tener confianza en el técnico, sino en el proyecto que el propio Ricardo Peláez ha puesto en marcha desde su llegada.

Ganarle el León el próximo lunes sería el fin de una racha de dos derrotas consecutivas, pero no la solución a los problemas que Chivas ha mostrado no sólo con Vucetich en este inicio de temporada, sino desde hace ya varios proyectos que, indebidamente, han sido cortados con la mano en la cintura.

Vucetich y Peláez pueden hacer un gran equipo en Chivas, pero para ello deben dejarlos trabajar tranquilos, incluso entre ellos, para que cada uno pueda cumplir con la parte que le corresponde.

Hasta ahora, los refuerzos no han estado a la altura de las exigencias, por lo que Víctor Manuel Vucetich necesita encontrar la forma de sacar provecho de los jóvenes para posteriormente consolidar su idea futbolística.

Chivas es uno de los equipos más importantes del futbol mexicano, pero debe entender que desde hace ya algunos años se encuentra en reconstrucción, así que tener paciencia será una de las claves para salga del bache en el que innegablemente se encuentra, pero insisto, no sólo ahora con Vucetich.

Quizá más labor de Ricardo Peláez sea regresarle la confianza a Oribe Peralta, uno de los refuerzos más sonados en los últimos años, pero que sólo ha anotado dos goles con Chivas; el último de ellos hace ya un año, el sábado 1 de febrero de 2020, cuando firmó el 2-0 ante el Atlético San Luis, que, no obstante rescató el empate en el último minuto.

Con 37 años de edad, Oribe ya no es goleador que fue en América, pero tiene mucha experiencia que aportar a los jóvenes talentos del equipo, como lo demostró en los Juegos Olímpicos de Berlín 2012, en los que México logró su primera medalla de oro.

En eso, Peláez, también delantero de América, Chivas y de la Selección de México, tiene mucha experiencia.

Entiende a la perfección el sentir de un jugador, porque lo fue; y entiende su papel ahora como director deportivo.

En América tuvo mucha paciencia con Miguel Herrera como técnico y los resultados se dieron con el paso del tiempo.

En Cruz Azul demostró ser leal a sus ideas y aunque no logró el título de la Liga MX, como muchos otros, dejó huella con la Copa MX y la Supercopa MX.

Con él en el cargo, Cruz Azul disputó la final del Apertura 2018 después de cinco años de ausencia y dejó atrás la amenaza del descenso, sin dejar de mencionar que impulsó a las fuerzas básicas, en un claro ejemplo de lo que puede hacer si se le deja trabajar.

Ojalá que Peláez también este convencido de que darle continuidad a Vucetich es, en este momento, la mejor de las opciones.

¡Que te lo digo yo!