/ jueves 12 de octubre de 2017

Juego de espejos

1. Operación Margarita. La crisis del PAN, como todo fenómeno político, debe verse a la luz de los movimientos que realizan diversas fuerzas y grupos interesados en disputar el poder, no solo en el seno del partido azul, sino en la construcción de una nueva correlación de fuerzas de cara a la próxima elección presidencial.

Es evidente, que, la renuncia de Zavala al PAN es únicamente la culminación de una fase operada desde Los Pinos para quebrar al grupo de Ricardo Anaya y con ello favorecer la presencia del PRI en un contexto de creciente desprestigio del partido tricolor. Y no debe pensarse que la facción anayista representa una alternativa verdaderamente opositora al régimen y al sistema de dominación. Lejos de ello, no debemos olvidar la luna de miel que los ahora “dueños” del PAN mantuvieron al inicio del sexenio con el grupo peñista, lo cual los llevó a apoyar las llamadas reformas estructurales, que cómo se sabe, no fueron más que la adecuación de un país periférico a los ritmos que exigieron las agencias financieras internacionales.

Así, que, la disputa pública entre los calderonistas y anayistas no tiene como eje el desmantelamiento del sistema de dominación política y económica, (ya lo demostraron durante 12 años de administración panista), sino que ahora dibuja un nuevo realineamiento en el PAN y complica el pacto que habían mantenido Calderón y Peña desde el inicio del sexenio actual. Por eso, la sesión de la Presidencia del Senado a Cordero, apoyada por el PRI, fue el banderazo para anunciar la alianza que ahora se exhibe sin rubor ni tapujos para dislocar al grupo del joven imberbe que dirige al PAN. Por eso,Calderón, Cordero, Lozano y Gil no renuncian y se quedan para torpedear desde adentro a Anaya y profundizar su deterioro. Ya habrá tiempo para abandonar el barco.

Asimismo, la candidatura independiente de Margarita Zavala debilita al PAN, favorece al PRI, puesto que disgrega el voto tradicionalmente azul, y anuncia la posibilidad de una alianza de facto entre el calderonismo y Meade, en el caso de que éste fuera el candidato tricolor. No olvidemos que el actual secretario de Hacienda fue empleado de Felipe Calderón. Por lo tanto, es perfectamente válido trabajar con la hipótesis de una posible alianza para la “gobernabilidad” entre los panistas disidentes y el grupo de tecnócratas que se busca mantener en Los Pinos.

2. El Frente ciudadano como agencia de colocaciones. A la luz de los cambios que están sucediendo en la realidad, las negociaciones internas de éste agrupamiento tienden a presentarse cada día más complicadas. La definición de su candidato presidencial es un punto que puede provocar nuevas rupturas, ahora también en el PRD.Claro, si se razona con cierta dosis de congruencia entre lo que queda del ´partido del sol azteca. Como están hasta ahora las piezas del ajedrez, el PAN podría tener mano en la candidatura presidencial y el PRD la de la ciudad de México. Las compensaciones se darían en las candidaturas al poder legislativo y en las de las gubernaturas.

El dilema estrictamente electoral que tiene el Frente es como lograr atraer votantes más allá de sus ya menguadas clientelas tradicionales. Su anunciado lema ciudadano podría servir para tirar el anzuelo a quienes pudieran atraerles simpatías y votos. Por supuesto el programa es lo menos importante para quienes sólo tienen una visión pragmática.

Epilogo. México seguirá dominado por la simulación y el atraso político. No más.

pedropenaloza@yahoo.com

 @pedro_penaloz

1. Operación Margarita. La crisis del PAN, como todo fenómeno político, debe verse a la luz de los movimientos que realizan diversas fuerzas y grupos interesados en disputar el poder, no solo en el seno del partido azul, sino en la construcción de una nueva correlación de fuerzas de cara a la próxima elección presidencial.

Es evidente, que, la renuncia de Zavala al PAN es únicamente la culminación de una fase operada desde Los Pinos para quebrar al grupo de Ricardo Anaya y con ello favorecer la presencia del PRI en un contexto de creciente desprestigio del partido tricolor. Y no debe pensarse que la facción anayista representa una alternativa verdaderamente opositora al régimen y al sistema de dominación. Lejos de ello, no debemos olvidar la luna de miel que los ahora “dueños” del PAN mantuvieron al inicio del sexenio con el grupo peñista, lo cual los llevó a apoyar las llamadas reformas estructurales, que cómo se sabe, no fueron más que la adecuación de un país periférico a los ritmos que exigieron las agencias financieras internacionales.

Así, que, la disputa pública entre los calderonistas y anayistas no tiene como eje el desmantelamiento del sistema de dominación política y económica, (ya lo demostraron durante 12 años de administración panista), sino que ahora dibuja un nuevo realineamiento en el PAN y complica el pacto que habían mantenido Calderón y Peña desde el inicio del sexenio actual. Por eso, la sesión de la Presidencia del Senado a Cordero, apoyada por el PRI, fue el banderazo para anunciar la alianza que ahora se exhibe sin rubor ni tapujos para dislocar al grupo del joven imberbe que dirige al PAN. Por eso,Calderón, Cordero, Lozano y Gil no renuncian y se quedan para torpedear desde adentro a Anaya y profundizar su deterioro. Ya habrá tiempo para abandonar el barco.

Asimismo, la candidatura independiente de Margarita Zavala debilita al PAN, favorece al PRI, puesto que disgrega el voto tradicionalmente azul, y anuncia la posibilidad de una alianza de facto entre el calderonismo y Meade, en el caso de que éste fuera el candidato tricolor. No olvidemos que el actual secretario de Hacienda fue empleado de Felipe Calderón. Por lo tanto, es perfectamente válido trabajar con la hipótesis de una posible alianza para la “gobernabilidad” entre los panistas disidentes y el grupo de tecnócratas que se busca mantener en Los Pinos.

2. El Frente ciudadano como agencia de colocaciones. A la luz de los cambios que están sucediendo en la realidad, las negociaciones internas de éste agrupamiento tienden a presentarse cada día más complicadas. La definición de su candidato presidencial es un punto que puede provocar nuevas rupturas, ahora también en el PRD.Claro, si se razona con cierta dosis de congruencia entre lo que queda del ´partido del sol azteca. Como están hasta ahora las piezas del ajedrez, el PAN podría tener mano en la candidatura presidencial y el PRD la de la ciudad de México. Las compensaciones se darían en las candidaturas al poder legislativo y en las de las gubernaturas.

El dilema estrictamente electoral que tiene el Frente es como lograr atraer votantes más allá de sus ya menguadas clientelas tradicionales. Su anunciado lema ciudadano podría servir para tirar el anzuelo a quienes pudieran atraerles simpatías y votos. Por supuesto el programa es lo menos importante para quienes sólo tienen una visión pragmática.

Epilogo. México seguirá dominado por la simulación y el atraso político. No más.

pedropenaloza@yahoo.com

 @pedro_penaloz

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