/ martes 16 de octubre de 2018

Ajo y Agua | El peor proceso mundialista

Esta vez quiero hablar de la Selección Nacional en mi columna. Y quisiera hacerlo de aspectos positivos, pero es imposible cuando, una vez más, nos damos cuenta de los malos manejos de nuestros dirigentes de la Federación Mexicana de Futbol.

Es más, podría asegurarles que estamos viviendo el peor proceso de selección del técnico nacional en toda la historia. No hay nada claro en el panorama y tampoco hay alguien que quiera arrojar luz sobre el camino que se está siguiendo para definir al hombre que llevará las riendas de la Selección Nacional hasta la Copa del Mundo de Qatar 2022.

Es en verdad increíble que desde las más altas esferas de nuestro balompié se atrevan a decir que en algún momento estuvieron contemplados 24 candidatos, con los cuales se entabló comunicación para analizar sus exigencias y ver qué tan cerca estaban del perfil establecido desde un principio.

Si la búsqueda fuera seria, no tendríamos que hablar de más de cinco candidatos, y todos ellos conocedores del futbol mexicano. Es más, ya saben mi postura al respecto, de preferencia que sea un técnico local, que se hizo y conoce todo lo referente a nuestra liga y los futbolistas. Además, todo el proceso tendría que realizarse de manera interna, privada, sin hacerlo público, porque así lo único que están haciendo es abaratar el puesto de técnico nacional que para mí es tan importante.

No es tiempo de seguir haciendo pruebas. Es hora de tomar decisiones, de elegir al hombre que se considere idóneo para dirigir a la Selección de México y que, a la brevedad posible, empiece a trabajar con un proyecto a largo plazo, que ya sé, es muy difícil que la Federación Mexicana de Futbol pueda aceptar.

Y es que ese es otro tema. Sí, ya es urgente que se elija al nuevo técnico, pero también es necesario que nuestros dirigentes piensen a largo plazo y respalden un proyecto de trabajo que contemple, cuando menos, un proceso de 12 años. Nunca se ha pensado de esa manera, pero si queremos crecer es momento de hacerlo y ver a futuro con una estrategia de desarrollo y crecimiento sostenidos en la que todos los integrantes de la familia futbolística nacional estén involucrados y comprometidos.

Todos tenemos que ver por nuestra selección, por nuestro futbol, si queremos que, de una vez por todas, se rompa la barrera del tan añorado quinto partido en la Copa del Mundo. Si trabajamos con orden y con objetivos perfectamente establecidos, todo es posible, pero si mantenemos esa actitud de resolver los problemas sólo de manera momentánea, entonces seguiremos igual, con una Selección que no puede competir con las grandes potencias y que, por ende, tampoco podrá escalar en las posiciones del futbol mundial.

Mientras tanto, yo no puedo ver las cosas de otra manera. En la Selección Nacional se está perdiendo el tiempo, pues de nada sirven partidos como el que se ganó el pasado jueves a Costa Rica o el que se juega esta noche contra Chile, cuando los futbolistas convocados por el técnico interino, Ricardo Ferretti, pudieran no estar contemplados por el entrenador que llegue a hacerse cargo del equipo mexicano con miras a la Copa del Mundo de 2022.

La otra opción que parecen estar manejando es traer a un técnico que acepte estar en una primera etapa que podría ser hasta conseguir el boleto para el Mundial. Y hay que hablar claro en la actualidad, porque a mí no me dieron el proceso de 12 años que les pedí, porque no tienen aguante para soportar un proceso largo. En cambio, se animarían a poner a alguien previo al Mundial, un año antes, para tener al director técnico idóneo, motivador, líder y con la experiencia suficiente para cumplir en esa corta pero importantísima recta final que concluye en la Copa del Mundo.

Y de ser así, yo me apunto para ser el primero en la lista. Yo sé que muchos otros técnicos también lo quisieran igual, pero ya que no hay esa persona idónea para pensar en un proyecto de 12 años, y dudo que lo encuentren… Lo tenían en mi persona, pero dejaron ir esa gran oportunidad de haber hecho algo trascendental en el futbol mexicano, algo que quedaría para la historia. Se arrepentirán toda la vida.

Ahora lo que están haciendo quedará para la historia, pero por el conformismo que están mostrando y la poca ambición para estar entre los grandes. Y por supuesto hay que descartar la posibilidad de ser campeones del mundo en un futuro no muy lejano. Tal y como vamos, creo que no seremos campeones del mundo nunca.

¿Con estas decisiones que toman nuestros dirigentes? Y no son todos. Hay algunos buenos. Obviamente que están al frente de diferentes equipos, pero dentro de la Federación y la Liga hacen falta asesores que realmente sepan y conozcan de futbol, y que se apoyen en nosotros. Yo me ofrecí a Emilio Azcárraga en su momento para ser el embajador del futbol mexicano y asesor de la Federación Mexicana de Futbol y de la Liga. Y parece ser que “no lleno los requisitos por falta de experiencia y conocimientos de futbol”, ni cumplo “con la imagen para ocupar ese puesto”.

En otros países sí lo hacen con sus leyendas. Es más, a mí primero me reconocen en España, donde ya fui embajador de la Liga durante varios años, y tristemente en mi patria no me reconocen como debería ser, ya que no me están sacando provecho ahora que todavía tengo fuerzas. ¡Que te lo digo yo!

Esta vez quiero hablar de la Selección Nacional en mi columna. Y quisiera hacerlo de aspectos positivos, pero es imposible cuando, una vez más, nos damos cuenta de los malos manejos de nuestros dirigentes de la Federación Mexicana de Futbol.

Es más, podría asegurarles que estamos viviendo el peor proceso de selección del técnico nacional en toda la historia. No hay nada claro en el panorama y tampoco hay alguien que quiera arrojar luz sobre el camino que se está siguiendo para definir al hombre que llevará las riendas de la Selección Nacional hasta la Copa del Mundo de Qatar 2022.

Es en verdad increíble que desde las más altas esferas de nuestro balompié se atrevan a decir que en algún momento estuvieron contemplados 24 candidatos, con los cuales se entabló comunicación para analizar sus exigencias y ver qué tan cerca estaban del perfil establecido desde un principio.

Si la búsqueda fuera seria, no tendríamos que hablar de más de cinco candidatos, y todos ellos conocedores del futbol mexicano. Es más, ya saben mi postura al respecto, de preferencia que sea un técnico local, que se hizo y conoce todo lo referente a nuestra liga y los futbolistas. Además, todo el proceso tendría que realizarse de manera interna, privada, sin hacerlo público, porque así lo único que están haciendo es abaratar el puesto de técnico nacional que para mí es tan importante.

No es tiempo de seguir haciendo pruebas. Es hora de tomar decisiones, de elegir al hombre que se considere idóneo para dirigir a la Selección de México y que, a la brevedad posible, empiece a trabajar con un proyecto a largo plazo, que ya sé, es muy difícil que la Federación Mexicana de Futbol pueda aceptar.

Y es que ese es otro tema. Sí, ya es urgente que se elija al nuevo técnico, pero también es necesario que nuestros dirigentes piensen a largo plazo y respalden un proyecto de trabajo que contemple, cuando menos, un proceso de 12 años. Nunca se ha pensado de esa manera, pero si queremos crecer es momento de hacerlo y ver a futuro con una estrategia de desarrollo y crecimiento sostenidos en la que todos los integrantes de la familia futbolística nacional estén involucrados y comprometidos.

Todos tenemos que ver por nuestra selección, por nuestro futbol, si queremos que, de una vez por todas, se rompa la barrera del tan añorado quinto partido en la Copa del Mundo. Si trabajamos con orden y con objetivos perfectamente establecidos, todo es posible, pero si mantenemos esa actitud de resolver los problemas sólo de manera momentánea, entonces seguiremos igual, con una Selección que no puede competir con las grandes potencias y que, por ende, tampoco podrá escalar en las posiciones del futbol mundial.

Mientras tanto, yo no puedo ver las cosas de otra manera. En la Selección Nacional se está perdiendo el tiempo, pues de nada sirven partidos como el que se ganó el pasado jueves a Costa Rica o el que se juega esta noche contra Chile, cuando los futbolistas convocados por el técnico interino, Ricardo Ferretti, pudieran no estar contemplados por el entrenador que llegue a hacerse cargo del equipo mexicano con miras a la Copa del Mundo de 2022.

La otra opción que parecen estar manejando es traer a un técnico que acepte estar en una primera etapa que podría ser hasta conseguir el boleto para el Mundial. Y hay que hablar claro en la actualidad, porque a mí no me dieron el proceso de 12 años que les pedí, porque no tienen aguante para soportar un proceso largo. En cambio, se animarían a poner a alguien previo al Mundial, un año antes, para tener al director técnico idóneo, motivador, líder y con la experiencia suficiente para cumplir en esa corta pero importantísima recta final que concluye en la Copa del Mundo.

Y de ser así, yo me apunto para ser el primero en la lista. Yo sé que muchos otros técnicos también lo quisieran igual, pero ya que no hay esa persona idónea para pensar en un proyecto de 12 años, y dudo que lo encuentren… Lo tenían en mi persona, pero dejaron ir esa gran oportunidad de haber hecho algo trascendental en el futbol mexicano, algo que quedaría para la historia. Se arrepentirán toda la vida.

Ahora lo que están haciendo quedará para la historia, pero por el conformismo que están mostrando y la poca ambición para estar entre los grandes. Y por supuesto hay que descartar la posibilidad de ser campeones del mundo en un futuro no muy lejano. Tal y como vamos, creo que no seremos campeones del mundo nunca.

¿Con estas decisiones que toman nuestros dirigentes? Y no son todos. Hay algunos buenos. Obviamente que están al frente de diferentes equipos, pero dentro de la Federación y la Liga hacen falta asesores que realmente sepan y conozcan de futbol, y que se apoyen en nosotros. Yo me ofrecí a Emilio Azcárraga en su momento para ser el embajador del futbol mexicano y asesor de la Federación Mexicana de Futbol y de la Liga. Y parece ser que “no lleno los requisitos por falta de experiencia y conocimientos de futbol”, ni cumplo “con la imagen para ocupar ese puesto”.

En otros países sí lo hacen con sus leyendas. Es más, a mí primero me reconocen en España, donde ya fui embajador de la Liga durante varios años, y tristemente en mi patria no me reconocen como debería ser, ya que no me están sacando provecho ahora que todavía tengo fuerzas. ¡Que te lo digo yo!