Por: Qiu Xiaoqui - Embajador chino en México.
China celebró el 18 de diciembre una reunión extraordinaria para conmemorar el 40o aniversario de la reforma y apertura. El presidente Xi Jinping hizo un resumen completo y profundo de este proceso de 4 décadas, así como de sus valiosas experiencias, y demostró una vez más la firme determinación del país de llevar la reforma y apertura hasta el final.
La reforma y apertura es una gran revolución en la historia del pueblo chino y la nación china. Hace 40 años, el Partido Comunista de China inició una gran revolución tomando la histórica decisión de llevar a cabo la reforma y apertura, hecho que se debe al juicio del destino del Partido y el país, al compendio de las prácticas de la revolución y construcción del socialismo, a la visión perspicaz de la tendencia del tiempo y al entendimiento de los anhelos y necesidades del pueblo. Las prácticas y éxitos de estos 40 años manifiestan que son completamente correctos el camino, la teoría, el sistema y la cultura del socialismo con peculiaridades chinas, así como lo son, la teoría, la ruta y la estrategia básicas del Partido.
La reforma y apertura es un hito en el camino de la gran revitalización del pueblo chino en los tiempos modernos. Gracias a la política, de 1978 a 2018, se ha cambiado enormemente el rostro de China, de la nación china, del pueblo y del Partido. En 40 años, la nación china logró un gran salto al ponerse de pie, enriquecerse y hacerse poderosa. El socialismo con peculiaridades chinas dio un gran salto desde crearse hasta desarrollarse y perfeccionarse.
El pueblo chino logró un gran salto de vivir con alimento y vestido insuficiente a una vida modestamente acomodada. La historia y la realidad manifiestan que la reforma y apertura es un arma mágica importante para que China se ponga al día, es la única forma de defender y desarrollar el socialismo con características chinas, y es la clave para determinar el destino de la China contemporánea. También es la clave para lograr los objetivos de “dos centenarios” y conseguir el gran rejuvenecimiento de la nación china.
La reforma y apertura no sólo ha traído progresos al país y el pueblo chino, sino que también ha promovido la paz y el desarrollo mundial. En 40 años, el ingreso per cápita disponible de China aumentó a 26 mil de 171 yuanes, China sacó a 740 millones de personas de la pobreza y construyó el sistema de seguridad social más grande del mundo. El PIB de China incrementó a 82.7 billones de yuanes en 2017, cuyo peso en el total mundial pasó a 15.2% de 1.8%. China contribuyó durante varios años consecutivos al crecimiento económico global con más de 30%.
China siempre se ha adherido al camino del desarrollo pacífico y la estrategia abierta de beneficio mutuo, ha participado activamente en la globalización económica y ha aportado al mundo conocimientos y planes como, la iniciativa de la Franja y la Ruta, la Expo Internacional de Importaciones y la comunidad de destino de la humanidad. Se ha convertido en constructor de la paz mundial, contribuyente del desarrollo global y defensor del orden internacional. Los logros demuestran que el desarrollo de China ha ofrecido una experiencia exitosa y ha mostrado una perspectiva brillante para otros países en desarrollo en su lucha por la modernización, sirviendo como una gran fuerza al impulso de la paz y el desarrollo del mundo y representando una gran contribución de la nación china al progreso de la civilización humana.
Pese a los éxitos de la reforma y apertura, China necesita cruzar más montañas y ríos. Enfrenta una misión más gloriosa, tareas más duras, retos más arduos y trabajos más grandes. Se han tocado las trompetas para la nueva era, en donde China hará esfuerzos sostenidos para seguir avanzando con valentía y la aspiración original intacta de reforma y apertura, en busca del sueño chino de la gran revitalización de la nación china y el sueño mundial de un hogar de paz duradera y prosperidad común de la humanidad.
