/ viernes 29 de diciembre de 2017

Con manos mancomunadas, China y México crearán un mejor futuro

por Qiu Xiaoqi *

Empezará pronto el año nuevo 2018. En este 2017 por concluir, China y México conmemoraron el 45 aniversario del establecimiento de las relaciones diplomáticas y celebraron el espectacular Año de la Cultura China en México. Las relaciones bilaterales disfrutaron de un buen ímpetu de desarrollo para avanzar hacia un nuevo nivel, y se llevó a cabo con vitalidad el intercambio y la cooperación en todos los aspectos.

En 2017, China y México han mantenido el desempeño de los lazos bilaterales a un alto nivel. En lo político, los dos mandatarios, Xi Jinping y Enrique Peña Nieto realizaron su séptimo encuentro en Xiamen desde que asumieron el cargo presidencial, y alcanzaron importantes consensos sobre el desarrollo de las relaciones bilaterales para la próxima etapa, los cuales sirven como una garantía política para el funcionamiento de alto nivel de los vínculos chino-mexicanos.

En lo económico y comercial, al principio de este año, el anuncio de la inversión conjunta para la instalación de una planta en Hidalgo por parte de la empresa china JAC y la mexicana Giant Motors enriqueció aún más la cooperación de la capacidad productiva; y el acuerdo del comercio electrónico firmado entre Alibaba y el gobierno mexicano en septiembre pasado abrió un nuevo espacio para la cooperación en Internet entre las empresas de ambos países.

En lo personal y cultural, las casi 200 actividades culturales celebradas bajo el marco del Año de la Cultura China en México estrecharon a los dos pueblos y el primer vuelo directo entre las dos naciones operado por China Southern Airlines contribuyó al intercambio de visitas como un “puente aéreo”, hechos que fomentaron las bases de la opinión pública para las relaciones binacionales. 

Al entrar en el 2018, año de inicio para que China entre en una nueva era y un año clave para el desarrollo de México, los lazos entre Beijing y la Ciudad de México se encontrarán en un nuevo punto de partida. Los dos grandes países en vías de desarrollo e importantes economías emergentes, que son el socio estratégico integral y la oportunidad de desarrollo el uno para el otro, deben avanzar con los tiempos, emprender diálogos a profundidad y elevar su cooperación estratégica, en aras de impulsar con manos mancomunadas un mayor desarrollo de sus relaciones bilaterales.

Primero, se debe mantener firme la orientación estratégica. La búsqueda del desarrollo y la cooperación siempre es el tono principal para los dos países. Con la cooperación pragmática que tienen las finanzas como el motor, el comercio e inversión como la línea principal y la infraestructura, energía y alta tecnología como los campos prioritarios, China y México conducirán los lazos bilaterales a un nuevo nivel.

Segundo, se debe ampliar los canales de cooperación. Los dos países se encuentran en etapas similares de desarrollo y coinciden en las estrategias, por lo que deben aprovechar las oportunidades ofrecidas por la profundización de las reformas, buscar nuevos puntos destacados de cooperación y ampliar los terrenos de cooperación, para inyectar nueva energía a sus vínculos.

Tercero, se debe estrechar los intercambios culturales y entre personas. Los contactos amistosos entre ambos pueblos tienen una larga historia. Las dos naciones tienen que impulsar el contacto e intercambio más frecuente y profundo entre todos los sectores sociales para incrementar el conocimiento mutuo y la amistad, a fin de que la cooperación chino-mexicana siempre gane el apoyo del pueblo.

Son evidentes los logros de las relaciones bilaterales en 2017 y está a la expectativa un mejor porvenir para éstas en 2018. China está dispuesta a trabajar con México para avanzar juntos y crear un futuro más brillante para los lazos entre ambos países.

*Embajador de la República Popular China en México

por Qiu Xiaoqi *

Empezará pronto el año nuevo 2018. En este 2017 por concluir, China y México conmemoraron el 45 aniversario del establecimiento de las relaciones diplomáticas y celebraron el espectacular Año de la Cultura China en México. Las relaciones bilaterales disfrutaron de un buen ímpetu de desarrollo para avanzar hacia un nuevo nivel, y se llevó a cabo con vitalidad el intercambio y la cooperación en todos los aspectos.

En 2017, China y México han mantenido el desempeño de los lazos bilaterales a un alto nivel. En lo político, los dos mandatarios, Xi Jinping y Enrique Peña Nieto realizaron su séptimo encuentro en Xiamen desde que asumieron el cargo presidencial, y alcanzaron importantes consensos sobre el desarrollo de las relaciones bilaterales para la próxima etapa, los cuales sirven como una garantía política para el funcionamiento de alto nivel de los vínculos chino-mexicanos.

En lo económico y comercial, al principio de este año, el anuncio de la inversión conjunta para la instalación de una planta en Hidalgo por parte de la empresa china JAC y la mexicana Giant Motors enriqueció aún más la cooperación de la capacidad productiva; y el acuerdo del comercio electrónico firmado entre Alibaba y el gobierno mexicano en septiembre pasado abrió un nuevo espacio para la cooperación en Internet entre las empresas de ambos países.

En lo personal y cultural, las casi 200 actividades culturales celebradas bajo el marco del Año de la Cultura China en México estrecharon a los dos pueblos y el primer vuelo directo entre las dos naciones operado por China Southern Airlines contribuyó al intercambio de visitas como un “puente aéreo”, hechos que fomentaron las bases de la opinión pública para las relaciones binacionales. 

Al entrar en el 2018, año de inicio para que China entre en una nueva era y un año clave para el desarrollo de México, los lazos entre Beijing y la Ciudad de México se encontrarán en un nuevo punto de partida. Los dos grandes países en vías de desarrollo e importantes economías emergentes, que son el socio estratégico integral y la oportunidad de desarrollo el uno para el otro, deben avanzar con los tiempos, emprender diálogos a profundidad y elevar su cooperación estratégica, en aras de impulsar con manos mancomunadas un mayor desarrollo de sus relaciones bilaterales.

Primero, se debe mantener firme la orientación estratégica. La búsqueda del desarrollo y la cooperación siempre es el tono principal para los dos países. Con la cooperación pragmática que tienen las finanzas como el motor, el comercio e inversión como la línea principal y la infraestructura, energía y alta tecnología como los campos prioritarios, China y México conducirán los lazos bilaterales a un nuevo nivel.

Segundo, se debe ampliar los canales de cooperación. Los dos países se encuentran en etapas similares de desarrollo y coinciden en las estrategias, por lo que deben aprovechar las oportunidades ofrecidas por la profundización de las reformas, buscar nuevos puntos destacados de cooperación y ampliar los terrenos de cooperación, para inyectar nueva energía a sus vínculos.

Tercero, se debe estrechar los intercambios culturales y entre personas. Los contactos amistosos entre ambos pueblos tienen una larga historia. Las dos naciones tienen que impulsar el contacto e intercambio más frecuente y profundo entre todos los sectores sociales para incrementar el conocimiento mutuo y la amistad, a fin de que la cooperación chino-mexicana siempre gane el apoyo del pueblo.

Son evidentes los logros de las relaciones bilaterales en 2017 y está a la expectativa un mejor porvenir para éstas en 2018. China está dispuesta a trabajar con México para avanzar juntos y crear un futuro más brillante para los lazos entre ambos países.

*Embajador de la República Popular China en México