/ sábado 3 de noviembre de 2018

Fama

Aunque Karen Coronado perdone a Alex Syntek, (y seguro lo perdonará) siempre le quedará la duda sobre la orientación sexual de su marido

Lo delicado de que Alex Syntek le dijera a un menor de edad: “Me gustan los británicos bonitos y sexys” es que a su propia esposa, Karen, hermana de Ingrid Coronado, ya le quedó la duda sobre la orientación sexual de su marido. Aunque honestamente no se lo encontró en la cama con el escuincle, los mensajes personales que le escribió al chamaco, que dice Alex se malinterpretaron, se le regresaron como bumerang y latigazos, porque su mujer lo sacó de su cama por mandar textos fantasiosos, con tendencias gay a la persona equivocada, precisamente porque con eso como que le entró la duda.

A DANIELA CASTRO LA VAN A EXONERAR

Los famosos creen que se pueden salir con las suya sin medir las consecuencias de cuánto lastiman y ofenden a quienes los aman. Que Daniela Castro no tenga crédito en su tarjeta para comprarse ropa por 20 mil pesos en un almacén de medio pelo, que vende trapos por toneladas o que como ella dice: “Alguien me puso un cuatro” ¿Y alguien le echaba la ropa en la bolsa?

No me digas que Zague amaneció loco un día y se sacó el miembro filmándose con el celular. O que un día le dio a Syntek por tirarle la onda a un chamaco que lo llamó “depravado”.
Ninguno de estos actos tiene justificación, pero a todos ellos los acabarán perdonando, porque aunque no sea a la primera vez y llega un día en el que finalmente te cachan, todos tenemos derecho a equivocarnos y a tomar lo ajeno o a filmarnos en nuestra intimidad sexual o a querer acostarnos en vez de con una sirena, con una ballena o con una quimera.

Pero aunque absuelvan a Daniela y no le quiten la visa (que es lo que seguro va a ocurrir) o Karen Coronado perdone a su marido Alex Syntek y lo meta de nuevo entre sus sábanas o que el futbolista Zague salga a la calle y todos le sonrían, el mal rato no se los quita nadie, el desafortunado golpe es para toda la familia y aunque tú los perdones y ellos aprendan a no irse detrás de cualquier nalguita o de un trapito que brilla… en el fondo siempre a todos los involucrados y también a los que no lo están, a todos les va a quedar la duda por siempre.




Aunque Karen Coronado perdone a Alex Syntek, (y seguro lo perdonará) siempre le quedará la duda sobre la orientación sexual de su marido

Lo delicado de que Alex Syntek le dijera a un menor de edad: “Me gustan los británicos bonitos y sexys” es que a su propia esposa, Karen, hermana de Ingrid Coronado, ya le quedó la duda sobre la orientación sexual de su marido. Aunque honestamente no se lo encontró en la cama con el escuincle, los mensajes personales que le escribió al chamaco, que dice Alex se malinterpretaron, se le regresaron como bumerang y latigazos, porque su mujer lo sacó de su cama por mandar textos fantasiosos, con tendencias gay a la persona equivocada, precisamente porque con eso como que le entró la duda.

A DANIELA CASTRO LA VAN A EXONERAR

Los famosos creen que se pueden salir con las suya sin medir las consecuencias de cuánto lastiman y ofenden a quienes los aman. Que Daniela Castro no tenga crédito en su tarjeta para comprarse ropa por 20 mil pesos en un almacén de medio pelo, que vende trapos por toneladas o que como ella dice: “Alguien me puso un cuatro” ¿Y alguien le echaba la ropa en la bolsa?

No me digas que Zague amaneció loco un día y se sacó el miembro filmándose con el celular. O que un día le dio a Syntek por tirarle la onda a un chamaco que lo llamó “depravado”.
Ninguno de estos actos tiene justificación, pero a todos ellos los acabarán perdonando, porque aunque no sea a la primera vez y llega un día en el que finalmente te cachan, todos tenemos derecho a equivocarnos y a tomar lo ajeno o a filmarnos en nuestra intimidad sexual o a querer acostarnos en vez de con una sirena, con una ballena o con una quimera.

Pero aunque absuelvan a Daniela y no le quiten la visa (que es lo que seguro va a ocurrir) o Karen Coronado perdone a su marido Alex Syntek y lo meta de nuevo entre sus sábanas o que el futbolista Zague salga a la calle y todos le sonrían, el mal rato no se los quita nadie, el desafortunado golpe es para toda la familia y aunque tú los perdones y ellos aprendan a no irse detrás de cualquier nalguita o de un trapito que brilla… en el fondo siempre a todos los involucrados y también a los que no lo están, a todos les va a quedar la duda por siempre.