A 198 años de la conquista de la Independencia de México, a través de la firma de los Tratados de Córdoba.
En siete días dará inicio el tercer periodo ordinario de sesiones de la actual legislatura federal y con él, una nueva elección de los titulares de los órganos de gobierno, básicamente de la Mesa Directiva de cada una de las cámaras federales.
Lo sucedido el pasado lunes en el Senado apunta en esa dirección, pues internamente el grupo parlamentario de Morena decidió democráticamente sobre quién será la persona que como grupo apoyará para que encabece los debates plenarios a partir del 1 de septiembre próximo.
Eran muchas y muchos los aspirantes, por lo que el coordinador parlamentario Ricardo Monreal Ávila propuso que ése fuera el método de selección, con el cual estuvieron de acuerdo las y los senadores del grupo.
Debo destacar que no es un procedimiento que sea utilizado frecuentemente al interior de ninguno de los grupos parlamentarios de ambas cámaras federales, de ahí lo encomiable voluntad mostrada por transparentar y democratizar este tipo de decisiones, las cuales nunca son sencillas, pues se deja heridos en el camino, pero es claro que la democracia así es.
Fue así como a través de papeleta y urna, se procesó internamente la elección de la candidata que deberá ser votada por el Pleno del Senado en la reunión preparatoria antes del 1 de septiembre próximo, fecha en que el Poder Ejecutivo enviará por escrito su primer informe sobre el estado que guarda la administración pública federal.
La elegida por el grupo parlamentario fue la tabasqueña Mónica Fernández Balboa, quien venía fungiendo como vicepresidenta de la Mesa Directiva y en las oportunidades en que dirigió los debates demostró temple, conocimiento y capacidad para conducir las sesiones plenarias.
Se trata de una política con trayectoria y experiencia tanto en el Legislativo como en la administración pública local.
Es así como el grupo parlamentario de Morena en el Senado no sólo ha salido fortalecido y cohesionado de este ejercicio, sino que también ha refrendado su apoyo, confianza y voluntad por que el zacatecano Ricardo Monreal Ávila siga siendo su coordinador parlamentario y presidente de la Junta de Coordinación Política.
Ello en reconocimiento no sólo a su experiencia y preparación, sino sobre todo al oficio político sensible que ha mostrado para resolver todos los asuntos internos del grupo parlamentario y dar a cada quien su lugar.
Esa actitud franca siempre será reconocible en líderes que no se dejan llevar por el canto de las sirenas y que demuestran humildad y sencillez en su proceder.
Así el ambiente al interior del Senado, ambas cámaras federales se aprestan a definir su organización interna para dar inicio a un periodo que se espera, sea de sumo complicado por los temas que figuran en las agendas parlamentarias.
Pero ante ello hay experiencia, capacidad y visión en los legisladores mexicanos.
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@jlcamachov
