Carlos Salinas (PRI), Ernesto Zedillo (PRI), Vicente Fox (PRIAN), Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto ocupan la Presidencia de 1988 a 2018. En Estados Unidos gobiernan Ronald Reagan (R), George Herbert Bush (R) William Clinton (D) y George W. Bush (R) de 1985 a 2008.
Al final de su periodo de reelección, Bush entrega un país -superpotencia indisputada- que ha perdido el rumbo y sus valores históricos. La revista Newsweek en la portada de una edición especial de 2008 formula la incógnita: ¿Podrá Estados Unidos -(Amereka)-volver a ocupar la cima? La caricatura que ilustra la incógnita es el Tío Sam con su sombrero de copa, de barras y estrellas, deteriorado, sentado sobre un banquillo inestable y con parches de cruz en la nariz y el pómulo derecho. Una desolada y pequeña ruina humana y deportiva…
De los artículos que escriben expresidentes estadounidenses, sesudos editorialistas especializados, gobernantes de países extranjeros afines a la gran (?) potencia, destacan los que le revelan al examo del mundo…¡global! que la gran nación ha extraviado sus valores esenciales: entre otros su respeto a los derechos ciudadanos dentro de Estados Unidos y en cualquier parte del mundo. También su aprecio existencial y respeto cívico por la democracia.
La torpeza política ha deteriorado sus virtudes económicas y empresariales. Confunde la libre competencia, con las responsabilidades que tiene en la observación de sus tratados comerciales y sus responsabilidades como país con fronteras financieras y económicas con todo el orbe. Y viene perdiendo capacidad de competir con otras naciones que están mostrando habilidades tecnológicas y virtudes empresariales. Para enfrentarlas emplea armas y tácticas de espionaje belicoso y amenazas de empleo de medios agresivos en vez de concertación comercial y financiera.
Por su parte, el diario Reforma, invitó a Carlos Salinas, a Vicente Fox y a Felipe Calderón -quizá no pudieron aceptar la invitación Ernesto Zedillo, ni Cuauhtémoc Cárdenas, quien fuera el primer candidato genuino a la Presidencia que no pertenecía al PRI-, a compartir sus experiencias en la edición del 1 de enero de 2018, con quien resulte elegido Presidente de los Estados Unidos Mexicanos.
Ninguno se refirió a problemas existenciales, económicos, escolares, de seguridad doméstica, de carencia de vivienda, del peligro en que cultivan sus parcelas; de padecimientos por incumplimiento de promesas de campaña de gobernadores, presidentes municipales, de lealtades desdeñadas, de propósitos externados pero no realizados…de deserción escolar por hambre, no solo en las primarias de las sierras o en las normales rurales, sino en aulas universitarias de las grandes Ciudades como la Ciudad de México, y las que funcionan en las capitales estatales, y en los Institutos Tecnológicos de Estudios Superiores que desde mediados de los años 70 funcionan en los estados de la República en especialidades técnicas y tecnológicas avanzadas. Ojalá se hable en próximas invitaciones que formulen esos mismos periódicos. Y otros más, muchos más, de raigambre en los lugares no tan importantes “políticamente” como la Ciudad de México.
